_
_
_
_
_

Burriel asegura que el "principal desordenador del territorio" es Blasco

El PP replica que los alcaldes del PSPV tiran por tierra su supuesta "virginidad urbanística"

El secretario de Territorio del PSPV-PSOE, Eugenio Burriel, culpó ayer al consejero de Territorio y Vivienda del PP de los grandes males que arrastra el desarrollo urbanístico. Para Burriel, el "principal desordenador del territorio" es Rafael Blasco por permitir crecimientos urbanísticos desmesurados sin planeamiento y sin prever servicios públicos. El PP replicó que la supuesta "virginidad urbanística" del PSPV la desmienten sus propios alcaldes.

"¿Qué pinta el IVVSA haciendo casas caras y garantizando el negocio a un socio privado?"

"Blasco es el principal desordenador de nuestro territorio", declaró Burriel en un comunicado de prensa, "porque permite la construcción de miles de viviendas sin ninguna planificación previa: ni territorial, ni municipal". En concreto, se refirió al área metropolitana de Valencia, de "especial gravedad", donde "el consejero impulsa una ciudad nueva en Manises para 30.000 habitantes, otra en Catarroja para 36.000 y otra en Massamagrell par 15.000 habitantes, sin plan general en cada municipio, ni un plan metropolitano".

Una situación que, a juicio del responsable de Territorio de los socialistas, afectará gravemente a los servicios públicos supramunicipales, ya que Blasco promueve estas urbanizaciones sin hacer los planeamientos que ordenan las leyes urbanísticas. "¿Qué depuradoras para los residuos de esa ciudad nueva o qué fuente de abastecimiento de agua hay previstas?", se pregunta Burriel, que menciona la contradicción que hay en que el propio IVVSA (Instituto Valenciano de la Vivienda), dependiente de Blasco, proyecte enviar las aguas residuales a la depuradora de Quart-Benácher, instalación que según los socialistas no se ha proyectado para acoger a esa nueva población. "Blasco se puede convertir en el responsable de un caos territorial que pagaremos por decenios, un caos similar al originado por el desarrollismo franquista", añade Burriel en el comunicado.

Las críticas no terminan ahí. Para los socialistas, "el propio consejero de Medio Ambiente es quien plantea reclasificar y urbanizar, sin planeamiento previo, centenares de hectáreas de suelo no urbanizable. ¡Qué ejemplo para los demás agentes que no estén tan obligados ni interesados por el medio natural! ¿Es ése el urbanismo modélico que pregonan Blasco y el PP y que todos deben imitar?".

Por último, el PSPV se cuestiona que el propio IVVSA promueva miles de viviendas libres "con la excusa de hacer viviendas de VPO [de protección oficial]" en los PAI que promueve mediante sociedades mixtas. "¿Qué pinta el IVVSA promoviendo miles de viviendas caras y garantizando el negocio a un socio privado mayoritario? Algo no huele bien en ese proyecto de Blasco y el IVVSA".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La respuesta popular no se hizo esperar. En un comunicado de la secretaria de Comunicación del PP, Sagrario Sánchez, se señala que son los propios alcaldes y concejales socialistas los que echan por tierra la "pretendida virginidad urbanística" del PSPV. Sánchez acusa a su vez a Burriel de ser "el verdadero artífice de la etapa más nefasta del urbanismo valenciano" en su etapa de consejero de Obras Públicas.

"El fracaso de Burriel se hace latente [sic] cada vez que los alcaldes de su partido deciden ningunearlo y desacreditarlo para promover, junto a la Consejería de Territorio del Gobierno valenciano, iniciativas innovadoras que tienen como objetivo algo tan necesario como es el acceso a una vivienda digna".

La secretaria de Comunicación del PP asegura que el Consell "triunfa" con el fomento, a través de sociedades mixtas, de viviendas de protección oficial "allí donde hasta el momento sólo se iban a construir viviendas libres".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_