El PP de Castellón suspende la firma de convenios con Narbona para una desaladora y una potabilizadora

El PP de Castellón ha optado por no dar más que hablar de momento. Después de que el presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, solicitara una desaladora entre Cabanes y Oropesa, los populares han decidido no acudir hoy a la firma del convenio que haría posible la ejecución de su petición. La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, tenía previsto para esta mañana la rúbrica de un acuerdo entre ambos ayuntamientos castellonenses, que había de contar también con la presencia de representantes de la Corporación provincial. Sin embargo, las tres instituciones, gobernadas por el PP, han decidido dar marcha atrás a una petición que chocaba con el argumentario del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, quien rechaza la desalación y el Programa AGUA como alternativa al derogado trasvase del Ebro. A este intento de boicotear la visita de la ministra se ha unido también el Ayuntamiento de Benicàssim, con quien Narbona había previsto la firma de otro acuerdo, en este caso, para la construcción de una potabilizadora.

Fabra pidió hace menos de dos meses a la empresa pública Acuamed una desaladora justo donde se construirá el parque de ocio Mundo Ilusión y se levantará una macrourbanización. La sociedad estatal admitió la petición y hoy mismo pretendía afianzar el proyecto.

El PP, que no firmará los convenios, caldeó ayer la visita de la ministra a Castellón y Sagunto, ciudad con la que firmará un acuerdo para construir una desaladora. El vicesecretario regional del PP, Ricardo Costa, calificó de "cómico y paradójico" el hecho de que Narbona visite Castellón tras la anulación del trasvase del Ebro, y el secretario autonómico de Infraestructuras, Pedro Marco, reprochó a la alcaldesa socialista de Sagunto, Gloria Calero, que ayude al ministerio a aportar nuevos recursos hídricos. Paradójicamente, dijo que las actuaciones de la Generalitat garantizan el "suministro presente y futuro del Camp de Morvedre".

Mientras, el consejero de Infraestructuras, José Ramón García Antón, anunció ayer la declaración de emergencia de una obra de conexión de la depuradora de Pinedo con L'Albufera para enviar 80 hectómetros cúbicos anuales al lago. El Plan Rector de Usos y Gestión del espacio protegido prevé una conducción de 9 kilómetros para usar los recursos de Pinedo. Según el consejero, la ampliación de la depuradora que permitirá desviar agua con el tratamiento adecuado "se encuentra en fase de pruebas". No hay plazos, pero Infraestructuras calcula que la obra podría estar lista a final de año. Según la consejería, las obras en siete depuradoras del área metropolitana aportarán 200 hectómetros cúbicos anuales.