"Va a haber pacto en la reforma del estatuto"

Javier Arenas (47 años, Sevilla) considera que ha cumplido los objetivos que se marcó hace 14 meses, cuando inició su segunda etapa como presidente del PP de Andalucía. En la entrevista, hace una advertencia a IU y PA sobre su papel en el mapa político autonómico y da por seguro que habrá acuerdo en la reforma del Estatuto de Autonomía.

Pregunta. ¿Cree que su línea de oposición es la correcta?

Respuesta. Creo que sí y que en este último año hemos avanzado mucho. Una de las claves de la política es administrar bien los tiempos y en este año quería que se cumplieran tres objetivos. Primero, consagrar al PP como la oposición insobornable. Lo segundo, empezar la renovación del partido en los ámbitos locales. Y lo tercero, poner los cimientos para la construcción de la alternativa. Hacía falta recomponer el PP tras una derrota inesperada y esa recomposición pasaba también por mejorar el trabajo de la oposición.

"Mi figura política, y que no se interprete como inmodestia, enerva a Chaves"

"El gran escándalo de esta legislatura va a ser la demostración de la tela de araña del PSOE"

P. Las encuestas dicen que el PSOE sigue igual y ustedes no suben. ¿Ha pensado en un cambio de estrategia?

R. En base a la experiencia que tengo, prefiero ir a las elecciones autonómicas con encuestas regulares. La experiencia del PP en Andalucía es que los sondeos buenos han significado siempre reagrupación del voto de izquierdas en torno al PSOE. Las encuestas que tenemos, de más de 50 municipios, nos dicen que estamos creciendo una media de tres-cuatro puntos. Lo que sucede es que el nivel de desgaste del PSOE no es elevado. El PP, hoy, tendría en Andalucía muchos más votos que el 14 de marzo, pero se está dando una tendencia clara al bipartidismo que debería hacer reflexionar en profundidad a Izquierda Unida y al PA. Estoy contento de la evolución del último año, hemos cometido algunos errores, pero no nos dedicamos a publicarlos.

P. ¿A qué errores se refiere?

R. Ya he anticipado que no me dedico a contarlos. Todos los días, desde que tengo uso de razón, he sido autocrítico. El político que no esté en un estado permanente de autocrítica no se puede calificar de inteligente. Probablemente ha habido algún error de comunicación en alguna cuestión. A veces hemos sido ingenuos al creernos propuestas del PSOE, que nos ha engañado en más de una ocasión.

P. Antes ha hablado de que apenas hay desgaste del PSOE.

R. Hay un desgaste leve del PSOE y lo justifico por el hecho de que en nuestra comunidad hay unos niveles de calidad de vida bastante aceptables y, sobre todo, por la pasividad del gobierno. Además, parte del desgaste del PSOE no se está notando en las encuestas porque está recuperando votos de IU. En estos momentos, el debate político en Andalucía es de una pobreza extraordinaria. En los próximos tiempos, voy a alimentar el debate político, pero probablemente lo haga desde la soledad. ¿Cómo evita Chaves el desgaste? Con la pasividad. Si se hace un repaso de las hemerotecas del último año, se ha hablado mucho del pensionazo, del viaje a Cuba, de los blindajes, ahora del Consejo Audiovisual... El PSOE no tiene ningún afán reformista, sí tiene el afán de perpetuarse eternamente en el poder y por eso existe esa pasividad. El nivel de riesgo que debe asumir cualquier gobernante, Chaves lo tiene en un cajón. No se va a arriesgar a nada, no va a proponer ninguna reforma en profundidad.

P. Habla de desgaste, pero hay veces que ustedes hacen circular mensajes como el de que la corrupción generalizada en Andalucía que parecen no responder a la realidad. ¿No puede suponer esto falta de credibilidad del que acusa?

R. Por lo pronto, es una realidad. En Andalucía, el PSOE lleva muchos años con muchísimo poder político. Eso, al final, produce muchas desviaciones de poder. Y esas desviaciones de poder van a ir aflorando esta legislatura. En estos momentos, en Sevilla hay una sensación de corrupción. Tantos años de poder provocan muchas desviaciones de poder y muchas corruptelas y, según los datos que tengo, en Andalucía hay una preocupación por los abusos que se cometen desde las instancias públicas.

P. Pero habla de sensaciones...

R. Tenemos el caso de Sevilla, el caso de Sanlúcar la Mayor, el de los familiares en la Diputación de Cádiz, el asunto de Canal Sur, que escandaliza a cualquiera. El gran escándalo de esta legislatura va a ser la demostración de la tela de araña del PSOE en Andalucía. Hasta donde puede llegar un partido político que no es sólo un partido, sino un auténtico poder que se ramifica hacia todos los sectores y condiciona la espontaneidad de toda la sociedad. El PP, en unos meses, empezará a explicar esa gran tela de araña impropia de un sistema democrático.

P. ¿Con usted en el Parlamento habría ocurrido el follón que provocó la suspensión del pleno?

R. Relativizo las cosas y creo que ha habido mucha hipocresía. Lo que no puede ser es que cuando un progre llama asesino a un militante del PP se proponga ponerle un monumento y cuando unos señores sacan un cartelito que dice "no más cacicadas" pues se organice la que organizó Chaves. El responsable del incidente en el Parlamento es Chaves, que da un manotazo al micrófono, que usurpa las funciones de la presidencia del Parlamento y se niega a contestar. Chaves es muy autoritario, como consecuencia de sus complejos, y a partir de ahí convirtió en un follón unos cartelitos que decían "no más cacicadas". Si yo hubiera estado sentado allí habría pasado lo mismo, porque el responsable del despropósito es Chaves.

P. ¿La relación suya con Chaves tiene arreglo?

R. Siempre he intentado tener buena relación institucional porque es mi obligación. Le he dicho que estaré cada vez que necesite de mí una opinión porque creo que tenemos la obligación institucional de entendernos, al margen de las consideraciones personales. Lo que sucede es que a partir de 1994, cuando el PP pasó de 26 diputados a 41 y yo era el candidato, el PSOE inició una campaña terrible de descalificación personal y creo que mi figura política, y que no se interprete como inmodestia, enerva bastante a Chaves. Institucionalmente, siempre dialogaré con Chaves aunque es una persona que no cumple su palabra.

P. En este año, ha hecho cambios en la dirección regional, en las provinciales y ahora está en las estructuras locales, pero en la dirección del grupo parlamentario todo sigue igual. ¿Ha pensado hacer cambios?

R. El momento de los cambios no se abre y se cierra. Si en algún momento veo opciones para mejorar el trabajo del partido lo propondré a mis compañeros. Me parece que Antonio Sanz es un portavoz parlamentario excepcional, nunca me he planteado que deje de ser portavoz, y exactamente lo mismo con Teófila Martínez. El Parlamento ha ganado viveza y es difícil porque el PSOE tiene mayoría absoluta y estamos viviendo una resurrección del rodillo. Insisto mucho en un tema: IU y PA deben reflexionar muy a fondo sobre su estrategia porque el afán de Chaves es dirigir el PSOE, el PA, IU y el PP.

P. Ya ha dicho dos veces lo de IU y PA.... Parece que echa en falta a Luis Carlos Rejón.

R. A IU le hace falta como el comer un proyecto propio. Con Rejón tuvo un proyecto propio y alcanzó los mejores resultados de su historia. Y en estos momentos...

P. Y a usted le vino bien esa situación.

R. Depende de cómo se mire. Sobre todo le vino bien al señor Valderas, que fue presidente del Parlamento con los votos de IU y del PP, algo que probablemente se le olvidó hace tiempo. Me vino bien en el sentido de que demostré que un señor de centro se puede entender en cuestiones que no son ideológicas ni programáticas con uno de IU. Eso me pareció un avance democrático muy importante. Si IU no se dota de un proyecto propio, desaparecerá de Andalucía en beneficio del PSOE.