Cruyff: "Dije sí a Txiki y Rijkaard, pero no influyo en la junta del Barça"

Johan Cruyff se desmarcó ayer de Joan Laporta, negando que las decisiones deportivas de la junta del Barcelona sean consecuencia de sus consejos. El presidente del Barcelona no quiso hablar, según dijo "para no dar carnaza que alimente este culebrón" en referencia a las discrepancias que mantiene con Sandro Rosell, vicepresidente deportivo de la entidad. Lo hizo Cruyff y fue contundente al negar su ascendente sobre Laporta. "Es cierto que en su momento le dije que Rijkaard sería un buen entrenador para el Barcelona y que me parecía una buena idea que contara con Txiki Begiristain. Pero nada más".

Para el que fuera entrenador azulgrana, han sido los medios de comunicación los que, con sus comentarios, han convertido en corriente de opinión a los ojos de la afición algo que en realidad no existe. "Yo no influyo para nada en las decisiones de la junta del Barça. Sí es cierto que me veo con Rijkaard o con Txiki y que hablamos de fútbol, como es normal entre gente de fútbol, pero no les he dicho nunca lo que tienen que hacer". Johan negó que haya aconsejado un solo fichaje a Laporta. "Si le dije que me parecía acertado confiar en Txiki y en Frank, no tiene sentido que interfiera ahora en sus decisiones", razonó antes de aconsejar que lo mejor para acabar con esta situación desagradable es fácil: "Que se callen los que hablan y dejen trabajar".

Cruyff dijo desconocer las razones que han llevado a Rijkaard a quejarse de la actitud de Rosell: "Él sabrá. Supongo que algo le habrá molestado y puede decir lo que quiera. Además, lo ha hecho acabada la temporada", valoró. Para el holandés lo normal es que los directivos no interfieran en la planificación deportiva y dio por buenas las contrataciones de Van Bommel y de Ezquerro.