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"Si te pegan y te insultan todos los días, quieres desaparecer"

Varias víctimas hablan del acoso escolar tras el suicidio de una joven en Elda

Cristina estudiaba duro. Su sueño era ser fiscal y, a sus 16 años, viajar a Estados Unidos. El martes pasado saltó desde un puente de 25 metros en Elda (Alicante), donde vivía con sus padres. Tres compañeras de colegio la zaherían constantemente. Cristina es, presuntamente, la segunda víctima mortal en ocho meses por acoso escolar.

"Cuando te pegan todos los días y te insultan, quieres desaparecer. Que desaparezcan los otros o tú", afirma Y., una joven de 18 años que todavía toma pastillas para dormir, fruto de la pesadilla que vivió con 12 años. Los dos casos son la punta de un iceberg, el de los niños y adolescentes que sufren agresiones de sus compañeros de aula. Cuatro de cada 100 alumnos de secundaria han sido agredidos, y la mitad de ellos ha presenciado cómo pegan o amenazan a sus compañeros. El Defensor del Menor de Madrid recibió 18 quejas por acoso en 2003; en 2004 fueron más del doble: 42. Expertos analizan algunas claves del fenómeno, y varias víctimas relatan su terrible experiencia.

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