Chaves afirma que la propuesta de financiación del tripartito de Cataluña "está ya rechazada"
El presidente avanza propuestas como la de incorporar nuevos impuestos a la cesta autonómica
A Manuel Chaves no le cabe duda de que la propuesta de financiación autonómica del Gobierno tripartito de Cataluña no va a salir adelante. En el pleno del Parlamento andaluz celebrado ayer, el presidente de la Junta recriminó a la oposición el cometer un "error estratégico" por reclamar un debate específico con propuestas de resolución sobre la iniciativa catalana porque, a su juicio, "está ya rechazada". Chaves aprovechó la sesión de control para avanzar un decálogo de propuestas sobre financiación como la de incorporar nuevos impuestos a la cesta que gestionan las comunidades.
Desde el Gobierno catalán, en cambio, el consejero de Comercio, el republicano Josep Huguet, advirtió de que la propuesta pactada por el tripartito catalán "es un pacto de mínimos, y no de máximos" tal y como había dicho anteriormente el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall.
Huguet respondió con la misma contundencia que mostró Chaves en la sesión de control al Gobierno, donde contestó a dos preguntas de IU y del Partido Andalucista sobre el sistema de financiación. Estos grupos quieren que el Parlamento andaluz fije ya una posición al hilo de la propuesta del tripartito catalán, a lo que se opone el PSOE por considerar que aún no es el momento.
A juicio de Chaves, hacer girar el debate de cómo se financian las comunidades alrededor del modelo presentado por el Gobierno del socialista Maragall es "un error estratégico". Y explicó sus razones: "La propuesta catalana está ya rechazada por todo el mundo. Yo no voy a debatir en la Conferencia de Presidentes ni en el Consejo de Política Fiscal y Financiera sobre la propuesta del tripartito sino sobre la que presente el Gobierno de la nación". El presidente andaluz dijo que en estos ámbitos la estimación catalana "será una más" de las que se presenten.
Chaves hizo estas afirmaciones después de que el portavoz andalucista, José Calvo, le exigiera que pusiera "pie en pared para que los catalanes no se salgan con la suya", una afirmación que no gustó al presidente. "Cuando debatimos de financiación no lo hacemos sobre Cataluña ni contra los catalanes". Dicho esto, rechazó de nuevo la propuesta del Gobierno del tripartito porque es "inaceptable un modelo de financiación a la carta".
La portavoz de IU, Concha Caballero, no compartió la reflexión del socialista de que no era necesario entablar una carrera entre las comunidades para presentar un nuevo modelo de financiación. "Esta batalla la damos ahora o la perdemos", afirmó, "porque la matemática política del Estado va por otro lado". Chaves se guardó en su respuesta a la portavoz de IU el anuncio de un decálogo de propuestas sobre el modelo de financiación que se comprometió a intentar consensuar con los grupos de la Cámara.
Las propuestas se basan en la mejora de la suficiencia financiera en igualdad con el resto, ampliar la autonomía fiscal con espacios fiscales propios y compartidos, añadir nuevos impuestos a la cesta de tributos, crear una agencia tributaria andaluza que colabore con la estatal y la de dar "más capacidad normativa y que las comunidades participen en la modificación de la normas tributarias". También defendió la publicación anual de lo que aportan y reciben las comunidades.
Chaves aseguró que su intención es formular un propuesta "que pueda servir para toda España". Caballero echó en falta la mención a la deuda histórica en el decálogo del presidente andaluz, pero la diputada de IU salió satisfecha de la sesión de control ya que al menos empiezan a vislumbrarse iniciativas concretas desde el Gobierno.
Horas más tarde y como estaba previsto, los tres grupos de la oposición no participaron en el debate de una proposición no de ley socialista sobre este mismo asuntos, por considerar que era necesario una discusión con propuestas de resolución. Tal vez porque los diputados lograron ser noticia en los telediarios nacionales por la bronca matinal, ningún grupo quiso tirar más de la cuerda a la hora de explicar su no participación.
La iniciativa del PSOE, que insta al Gobierno a intentar consensuar una propuesta con los grupos, contó sólo con los votos socialistas. El portavoz de este grupo, Manuel Gracia, afirmó: "Por encima de nuestros errores está la institución que exige que cumplamos con la función para la que nos han elegido. Esto es un Parlamento y conviene no olvidar la etimología de las palabras. Es la institución para hablar y, si no es eso, no es nada. Cuando se renuncia a la palabra se renuncia a defender a los que nos han elegido".
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