El Príncipe elogia el afán de Menorca por preservar su lengua y su naturaleza

El Príncipe resaltó ayer que Menorca, que "ha tenido un vaivén de culturas y civilizaciones, representa un caso excepcional de fidelidad histórica a su propia memoria". Don Felipe y doña Letizia visitaron ayer este "territorio finito y limitado", según lo definió la presidenta del Consejo Insular, Joana Barceló. El príncipe de Asturias ponderó el "afán por conservar y proteger el delicado equilibrio del privilegiado medio natural" y el compromiso de la sociedad menorquina por la "fidelísima pureza de la lengua propia".

En la tercera jornada del periplo oficial de los príncipes de Asturias por Baleares -que hoy continuará en las islas de Ibiza y Formentera- se repitieron las escenas de expectación popular, simpatía y cálida acogida a los Príncipes en las calles de Mahón y Ciutadella. Fue en las puertas del claustro y mercado del Carmen de Mahón donde doña Letizia y don Felipe efectuaron un dilatado recorrido a pie para poder saludar a los centenares de ciudadanos agolpados a ambos lados de la calle.

Las expresiones de afecto por parte de grupos de jóvenes y mayores calaron hondo en el ánimo de la pareja. Don Felipe contuvo con timidez su emoción, en un momento dado, mientras la princesa Letizia y él eran piropeados y festejados sin estridencias por los vecinos menorquines. La presidenta socialista Joana Barceló subrayó que los Príncipes iban a conocer "el corazón de Menorca, su tierra y su gente", que componen en la pluralidad "una de las pequeñas realidades geográficas de España que llamamos islas".

Antes de volar por la mañana desde Palma hacia Mahón, don Felipe, en su calidad de comandante del Ejército, visitó la base militar General Asensio de Palma, pasó revista a las tropas y desayunó con la oficialidad en el cuartel. A lo largo de los contactos menorquines y citas preparadas con la sociedad civil y cultural, bolígrafo en mano, los Príncipes efectuaron preguntas concretas a sus interlocutores, en este caso en su mayoría industriales zapateros, bisuteros y náuticos.

A media tarde recorrieron la fábrica de queso mahonés de la cooperativa insular en Alaior. Posteriormente acudieron a Ciutadella, donde les ovacionaron en la calle varios miles de personas.

Reserva de la biosfera

Menorca, declarada reserva de la biosfera por la Unesco hace más de una década, para el Príncipe representa "una sociedad que concita la admiración de todos los españoles" porque los insulares han sabido permanecer "dueños de su memoria histórica y de su singular patrimonio, sin dejar de ser una sociedad dinámica y abierta al futuro".

El heredero de la Corona evocó a su abuelo el conde de Barcelona como impulsor de su afecto hacia la isla de Menorca, y manifestó su "compromiso personal junto al de la Princesa, nacido de la vocación de servicio a los españoles, que conlleva la función integradora desempeñada por la monarquía parlamentaria".