Bilbao registra casi una denuncia diaria por el ruido

Bilbao registró el pasado año casi una denuncia diaria por ruidos. El Ayuntamiento recibió un total de 281 quejas formales, la mitad de ellas contra establecimientos hosteleros. Las inspecciones municipales acabaron con 59 sanciones económicas, con multas de hasta 900 euros, y el cierre temporal de un total de 34 locales nocturnos.

La capital vizcaína fue la primera gran ciudad española en disponer de un mapa acústico, elaborado en 1987 y que fue actualizado en 2000. El pasado año, el Ayuntamiento realizó casi 750 inspecciones en locales, que dieron lugar a la implantación de medio centenar de medidas contra el ruido, que van del aislamiento de focos sonoros a retiradas y precintos de equipos musicales.

Las sanciones más importantes afectaron a cinco locales, que fueron clausurados más de una semana. Uno de ellos fue cerrado durante dos meses, según detalló el área municipal de Medio Ambiente. Además, el pasado año se retiraron 31 motocicletas y ciclomotores por exceso de ruido.

La concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Julia Madrazo (EB), destacó que las infracciones acústicas en la hostelería "han bajado", mientras aumentan los problemas por las instalaciones de aire acondicionado. Madrazo señaló que el consistorio tratará de evitar que éstas se coloquen en los patios interiores de los inmuebles.

El nuevo mapa acústico de Bilbao estará concluido para 2007 con el objetivo de cumplir una directiva de la UE. Por vez primera, se incluirá en él un estudio psicosocial con la percepción de los ciudadanos sobre el ruido y sus causas. Para ello se realizarán encuestas y entrevistas por todos los barrios de Bilbao.

Los resultados del informe, que se quiere adjudicar este verano para que esté concluido a principios de 2006, se trasladarán a un simulador informático para lograr un mapa actualizado de los ruidos de Bilbao y las fuentes causantes. Julia Madrazo afirmó que el informe permitirá implantar medidas novedosas, como la creación de zonas de protección acústica mediante un mayor aislamiento en las viviendas, la disminución del tráfico o la plantación de arbolado para mitigar el impacto.

La concejal dijo que la capital vizcaína tiene ahora la ordenanza municipal sobre ruidos más restrictiva de España: durante la noche, en las viviendas no se pueden superar los 30 decibelios y, en horario diurno, el límite está en los 40.