Alcaldes y vecinos se oponen a la apertura de una prisión en la Segarra

La intención de la Generalitat de construir antes del año 2010 una prisión en un municipio no concretado de la comarca de la Segarra ha levantado una fuerte oposición entre los vecinos y la mayoría de los alcaldes de la zona. La controversia generada va en aumento cada día y las posturas mayoritarias son contrarias a acoger un centro penitenciario con capacidad para 500 reclusos.

El delegado del Gobierno de la Generalitat en Lleida, Jaume Gilabert, admitió ayer que el Ejecutivo catalán ha contactado con algunos alcaldes de la Segarra y ha explorado posibles ubicaciones para la prisión en esta parte de la Cataluña central, pero añadió que todavía no se ha tomado ninguna decisión en firme porque primero se quiere conseguir la aprobación del territorio. "La Segarra", añadió Gilabert, "es uno de los lugares idóneos para ubicar la prisión, pero no se construirá si los habitantes de la comarca no la quieren". El pleno del Ayuntamiento de la localidad de Sant Ramon rechazó el pasado viernes el proyecto de forma unánime.

Todavía no existe una ubicación exacta para el equipamiento carcelario; sin embargo, la Generalitat sopesa la posibilidad de construirlo en el triángulo formado por Estaràs, El Portell, Sant Ramon y Ferran (Segarra) y Pujalt (Anoia).