Un sector de los socialistas vascos quiere incluir a EHAK en la ronda de contactos

Los socialistas vascos van a por todas en su estrategia en busca de apoyos para que su líder, Patxi López, pueda convertirse en el próximo lehendakari. El Comité Nacional del PSE dará luz verde el próximo jueves a la propuesta de la dirección de abrir una ronda de contactos con las fuerzas que han logrado representación parlamentaria. Un sector creciente del PSE está por incluir en esa ronda a los comunistas de EHAK, para los que pidió el voto la ilegalizada Batasuna. "A día de hoy, es un partido legal y tiene representación en la Cámara vasca. Creo que habría que llamarles como una formación más", apunta un destacado miembro de la ejecutiva del PSE. López iniciará la ronda con María San Gil, cabeza de lista del PP vasco.

Los socialistas creen que ha llegado la hora de Patxi López. Tras constatar que el lehendakari en funciones, el peneuvista Juan José Ibarretxe, no ha logrado en su primera ronda de conversaciones ensanchar sus apoyos iniciales para la investidura, el PSE-EE quiere jugar su baza.

Una apuesta no exenta de riesgos a medio plazo, ya que si finalmente logran sumar los votos de los populares de María San Gil, se evidenciaría un bloque constitucionalista, en parte ficticio, pero suficiente para poner nervioso al candidato de PNV-EA. Un bloque de 33 escaños. Los que casi seguro sumará también Ibarretxe en favor de su candidatura con los apoyos de su coalición nacionalista, los tres de Ezker Batua (que aspira a mantenerse en el Ejecutivo vasco) y el previsible de la parlamentaria de Aralar, Aintzane Ezenarro.

Pero hasta llegar a ese escenario, los socialistas quieren explorar todas las vías. Y un sector creciente del PSE-EE, con fuerza en Vizcaya y en Guipúzcoa, pretende incluir a los comunistas de EHAK en la ronda de contactos que abrirá Patxi López tras la reunión del Comité Nacional. Un alto dirigente del socialismo vizcaíno defiende abiertamente lo que no deja de ser una evidencia: que EHAK es un partido legal. La Comisión Ejecutiva del PSE no ha adoptado aún ninguna postura sobre este asunto, pero son varias las voces que defienden abrir la ronda con normalidad a todos los partidos con representación en el Parlamento vasco, incluidos los comunistas, que fueron premiados en las urnas con nueve escaños y los votos de la ilegalizada Batasuna.

Reunión Zapatero-Ibarretxe

En la dirección de los socialistas vascos son conscientes de que este movimiento no será muy bien acogido por los populares. La presidenta del PP vasco, María San Gil, indicó ayer en una entrevista en el grupo Vocento que todavía quiere oír de primera mano a López que va a presentar su candidatura.

El PSE quiere, además, esperar a conocer el resultado de la reunión que mantendrán el jueves, el mismo día en que los socialistas reúnen su Comité Nacional el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y el lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe. Y una vez con todos los datos en la mano, reunirse con el resto de fuerzas. San Gil aseguraba ayer que "Ibarretxe va a intentar que López no se presente, y ahí es donde pongo en duda la autonomía del López".

Aunque aún es muy precipitado avanzar la estrategia del PSE, sobre todo cuando ni siquiera se ha iniciado la ronda de contactos de López, los socialistas vascos finalmente deberán también deshojar su propia margarita: ¿Retirarán su candidatura en la segunda votación de la investidura -en la que sólo es necesaria una mayoría simple para se investido presidente vasco-, evitando así forzar a Ibarretxe a echarse en brazos de EHAK? Públicamente, López lo negó ayer en Bilbao, aunque la incógnita continúa.

Otros dirigentes del PSE dibujan otro escenario posible: "Si los populares no apoyan a Patxi [López] en la investidura y el lehendakari en funciones acepta los votos de EHAK, nos sitúa a nosotros en la centralidad política. Justo lo que defendemos los socialistas vascos".

Algunos de los socialistas vascos que defienden escuchar a EHAK esperan que San Gil evite seguir la estela del líder nacional del PP, Mariano Rajoy, y no utilice este asunto para "desgastar a Zapatero y a su Gobierno". "Es algo poco entendible en clave vasca, pero ella sabrá la autonomía que quiere tener frente a Génova", indican las mismas fuentes.

Tras el análisis que realice el Comité Nacional del PSE y la entrevista Zapatero-Ibarretxe, López abrirá la ronda a partir de la siguiente semana para conocer las intenciones y "las condiciones" que quiera poner San Gil.