Humillación continuada
Muestro gran preocupación ante los hechos ocurridos en la boca del metro de Ciudad Universitaria de Madrid. Me pregunto qué mal hacen unas cuantas personas vendiendo amuletos, chapas o cinturones a precios módicos intentando subsistir en nuestro país, para que la policía aparezca de repente, y encima llegue a humillarles.
Sí, han leído bien.
En este país se sigue humillando a aquellas personas que no tienen el poder de defenderse por su situación personal (probablemente sean inmigrantes ilegales, increíble que haya personas ilegales en el 2005). Se ponen a correr detrás de ellos en sus motos mientras estas personas cruzan con gran miedo una carretera con el semáforo en verde (para los coches), con el riesgo de ser atropellados.
Todo esto no sería muy escandaloso si no fuera por el hecho de que los policías se bajan de sus vehículos y comienzan a reírse a carcajadas (verídico).
Para colmo, iba con una compañera hacia el metro la cual me dijo literalmente "si les hacen eso es porque sólo vienen a delinquir". Yo no quiero afirmar que este país sea racista, ni mucho menos. Pero somos muy clasistas y perdemos muy pronto la memoria cuando nos interesa. En el mundo no hay ni españoles buenos ni marroquíes malos: hay personas buenas y malas personas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.