Castigo ejemplar por reincidente
La UEFA sancionará mañana al Inter con una fuerte multa y el cierre temporal o por partidos de un estadio clausurado ya tres veces
El Comité de Control y Disciplina de la UEFA tiene previsto anunciar a las tres de la tarde de mañana, una hora aproximadamente después de iniciarse su reunión en Nyón (Suiza), la sanción que aplicará al Inter por los incidentes que obligaron a suspender en el minuto 72 el partido que el martes le enfrentaba al Milan en San Siro. Además de dictaminar sobre el encuentro y la eliminatoria, a partir de los informes del árbitro, el alemán Markus Merk, y del delegado de campo del organismo europeo -ambos dieron provisionalmente la victoria al Milan por 0-1-, la UEFA aplicará un severo castigo al Inter tanto por la gravedad de los hechos como por tratarse de un club reincidente. Mientras tanto, la policía italiana detuvo ayer a cuatro ultras interistas por el lanzamiento de bengalas y petardos tras identificarlos a través de las imágenes televisivas y no descartaba que anoche mismo se produjeran nuevas detenciones.
Los aficionados del club italiano han protagonizado actos vandálicos en otras ocasiones, dos de ellas frente a equipos españoles. El 2 de marzo de 1983, el Inter-Real Madrid, de los cuartos de final de la Recopa, tuvo que suspenderse momentáneamente en el minuto 50 después de registrarse una lluvia de objetos contra los madridistas y el árbitro, Tikat Talat. Reanudado, acabó con empate a un gol. La UEFA clausuró entonces el campo del Inter por dos encuentros.
Otro cuadro español, el Alavés, se vio inmerso en un choque accidentado con el equipo italiano. Ocurrió el 22 de febrero de 2001 en la vuelta de los octavos de final de la Copa de la UEFA, cuando, en el minuto 83, los ultras nerazzurri lanzaron multitud de objetos sobre el área del conjunto vitoriano, claro ganador de la ronda: 0-2 en el marcador de la vuelta y 3-3 en el de la ida. El árbitro, Barber, paró el encuentro cinco minutos y accedió a proseguirlo en una situación "límite" que fue corroborada por la UEFA con una nueva sanción: cerró el campo otra vez por dos encuentros y multó al club con 94 millones de liras (unos 48.500 euros).
El Inter también ha sido protagonista de incidentes en los partidos de la Liga italiana, sobre todo en la temporada 2000-01, cuando un grupo de aficionados tiró una moto desde el segundo anfiteatro en un partido contra el Atalanta con un riesgo gravísimo para el público de las gradas bajas. Al igual que ya ocurrió en las sanciones europeas, el campo fue clausurado por dos partidos.
Aunque la UEFA es muy hermética respecto a asuntos como el de las posibles sanciones, se asegura que el castigo que aplicará al Inter va a ser ejemplar. Además de una multa de importante cuantía, su estadio será nuevamente cerrado, pero en esta ocasión la clausura superará los dos partidos. En medios italianos se especula incluso con que podría decidirse una sanción temporal, que podría llegar a ser de un año, en vez de por un número determinado de partidos.
El Comité de Control y Disciplina de la UEFA, presidido por el español Josep Lluís Vilaseca, ya sancionó en septiembre pasado al Roma con la derrota por 0-3 ante el Dinamo de Kiev, en partido correspondiente a la liguilla inicial de la Liga de Campeones, y con dos encuentros a puerta cerrada en el estadio Olímpico.
El encuentro entre el equipo italiano y el ucraniano había sido suspendido porque el árbitro, el sueco Anders Frisk -el mismo que se ha retirado por las amenazas recibidas por parte de supuestos hinchas del Chelsea con motivo del choque con el Barcelona- resultó herido por un mechero lanzado desde la tribuna.
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