"Xerox no se parece en nada a la empresa de hace cuatro años"
Anne Mulcahy, directora general de la empresa, ha conseguido triplicar el valor de la acción, reducir la deuda a la mitad y pasar de pérdidas a cuantiosos beneficios
Hace cuatro años Xerox estaba al borde de la bancarrota. El entonces director general Paul Allaire, un hombre de gris, con su segunda Mulcahy, también de gris, reunía a periodistas de todo el mundo para decirles que el futuro era de color. La convocatoria, con un centenar de periodistas de unos 36 países se repitió hace unas semanas en San Francisco. Y otra vez se repetía el mensaje: el mundo es en color. "¿En qué que ha cambiado Xerox en estos cuatro años? Pues que entonces yo no era la directora general, ¡Ja, ja, ja, ja!".
Anne Mulcahy, aquella mujer gris a la sombra de un hombre también gris que pretendía convencer a la gente de que el mundo era en colores, es hoy efectivamente una mujer de color, con chaqueta rosa, cuidado peinado y maquillaje. "Xerox no se parece en nada a la Xerox de hace cuatro años", contesta a las preguntas de Ciberp@ís. "No hay más que ver los resultados de la compañía. Estamos totalmente centrados en el color. En los dos últimos años hemos sacado 75 nuevos productos. Nos hemos centrado en el mercado al que nos queremos dirigir, y no sólo en las grandes empresas. Hace cuatro años los beneficios por el color eran cero".
En abril de 2001 Xerox rozaba la bancarrota. A los cuatro meses, Allaire fue destituido. La situación era tan dramática que el consejo de administración echó mano de lo más cercano que tenían, Anne Mulcahy, una mujer que lleva en la empresa 29 de sus 52 años.
El 25% de ingresos en color
Hace cuatro años, la acción de Xerox estaba a 4,7 dólares, hoy a 15; hace cuatro años, Xerox debía 17.000 millones de dólares, hoy unos 9.000; hace cuatro años se perdían 94 millones, en el último ejercicio se ganaron 859. Mulcahy le ha dado la vuelta a la compañía.
Los ingresos de las impresoras de color le suponen hoy el 25% del total (3.900 millones de dólares), nueve puntos más que hace cuatro ejercicios.
Actualmente sólo el 3% del papel impreso en la oficina es en color; pero en 2008 ya será el 10%. "Europa está adoptando la impresión en color bastante mejor que Estados Unidos", recalca Mulcahy.
El futuro de Xerox tiene que ser en color, porque además por cada página que se imprime la empresa gana cinco veces más que los ingresos por página en blanco y negro. Sin embargo, Xerox se encuentra en medio de la disyuntiva de "imprimir en color" y "oficina sin papeles". "Sí", responde Mulcahy, "es cierto; pero lo de la oficina sin papeles lo venimos oyendo hace muchos años y, sin embargo, se imprime más que nunca. ¿Sabe cuál es la impresión que más creció en las empresas el último año? El e-mail. ¡Ja, ja, ja, ja!".
Indudablemente Mulcahy está feliz; pero tras la risa se pone seria y recupera la pregunta. "El reto es que nuestros equipos multifunción tengan la capacidad de digitalizar toda la información que, de forma cada día más abundante, llega a los centros de trabajo por distintas vías. Que la digitalicen y clasifiquen, y que luego se imprima en color; porque la información será digital, pero la comunicación será en papel y en color".
XEROX: www.xerox.es
Una página de color cada 2,5 segundos
Imprime, escanea y copia en color a una velocidad de 1.440 páginas a la hora, 24 al minuto, 1 cada 2,5 segundos. Es la C2424, la nueva máquina multifunción de Xerox pensada para oficinas y empresas con más de 20 personas. Hay modelos de 2.999 a 4.299 euros, pero Mulcahy advierte a las empresas de que con esta máquina se ahorrarán el 63% en costes de impresión. Y, además, en color.
Xerox lucha desde hace cuatro años por recuperar el espacio perdido en las oficinas por culpa de la competencia de Canon, HP o Lexmark. La nueva máquina C2424 pone a Xerox por delante de todos ellos, según su directora general.
La nueva maravilla no tiene cartuchos de tinta, sino barritas de colores. Funciona con tecnología de color de tinta sólida de paso único, patentada por la empresa. Sus ventajas: mayor sencillez y mayor respeto por el medio ambiente. Después de 100.000 páginas, una impresora láser típica puede crear más de 54 kilos de residuos, mientras que la impresora de tinta sólida produce tres, según datos de Xerox.
Aparte de multifunción, el aparato es multitarea, es decir, se puede escanear mientras se imprime. El doble cabezal escanea a la vez las dos caras del documento, reduciendo el riesgo de atasco y aumentando la productividad. Trabaja con un tamaño máximo de papel de 216 x 356 mm y con una variedad de papeles con gramajes de 60 hasta 220 g/m2.
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