Chiclana honra a Paquiro en su segundo centenario con una muestra

La figura de Francisco Montes, Paquiro (Chiclana de la Frontera, 1805-1851) sigue despertando entusiasmo entre los aficionados a la tauromaquia. Ahora, con motivo de la celebración de su segundo centenario, la Casa de la Cultura de su ciudad natal abre al público la exposición Paquiro y su época, un apasionante recorrido por la vida del diestro, su pensamiento y la sociedad en que se forjó. La muestra, que permanecerá abierta hasta el próximo 14 de mayo, ha sido comisariada por el historiador José Antonio Merino y el profesor Jesús Romero.

Desde que tomara la alternativa en Madrid de manos de El Morenillo, en 1831, Paquiro supuso un revulsivo en el ámbito de la fiesta. Cinco años después, toreó en todas las corridas que se celebraban en la capital de España, y en 1836 veía la luz la obra que le abriría las puertas grande de la historia: la Tauromaquia completa, cuya redacción se atribuye -no sin polémica- al crítico Santos López Pelegrín. Su influencia se extiende a la consolidación del toreo a pie, el traje de luces e incluso a la técnica de la lidia, pues está considerado inventor del galleo.

En palabras de Jesús Romero, la exposición Paquiro y su época "tiene como fin aproximarnos a la figura de Paquiro para comprender, por un lado, lo que hereda de su tiempo, y por otro el legado que él mismo deja". "Se trata, en definitiva, de ponerlo en su contexto histórico y taurino", comenta.

"Un ilustrado"

Para ello, la muestra ha sido estructurada en tres tercios, "como en la plaza". El primero describe la sociedad romántica europea, española y gaditana. El segundo cuenta las transformaciones que sufrió la fiesta en aquel tiempo, con la decadencia del toreo a caballo, el perfeccionamiento técnico y ornamental impuesto respectivamente por las escuelas de Ronda y Sevilla y la irrupción de grandes figuras. El último recorre la experiencia vital de Francisco Montes, con especial protagonismo de la figura de su padre, administrador de finca que en vano quiso para su hijo un futuro de médico, entre otras vicisitudes.

"Aunque su vivencia es romántica, Paquiro es un ilustrado, un enciclopedista. Somete al toro a críticas de la razón, y a través de ella trata de embridar la fiesta", apunta Romero. "Quiere decir lo que es el toreo, y decidirlo para siempre", añade. La exposición está compuesta por paneles didácticos, realizados con intención itinerante, así como piezas procedentes de museos, bibliotecas y colecciones particulares. Desde un estoque del torero y diversos objetos personales, a libros y retratos firmados por nombres tan relevantes como José Elbo, Gutiérrez de la Vega, Eugenio Lucas o Antonio Cavanna -pero también nombres contemporáneos como Antonio Vela, Ricardo Urréjola o Enrique Quevedo-, Paquiro y su época pretende reflejar también cómo ha venido siendo vista y representada la fiesta durante las dos últimas centurias.