_
_
_
_
_

La figura de Juan Pablo II impulsa la tentación continuista en el cónclave

La 'ley de silencio' impuesta por Ratzinger favorece a la curia vaticana

La iniciativa del influyente cardenal alemán Joseph Ratzinger de prohibir a los príncipes de la Iglesia que concedan entrevistas a los medios de comunicación ha favorecido que sólo el recuerdo de Juan Pablo II y las tendencias continuistas gocen de difusión a una semana del inicio del cónclave. Así, las homilías de las misas solemnes de novendiales se han convertido en la única vía para lanzar mensajes al resto del cuerpo electoral y al conjunto del catolicismo.

Ayer le tocó el turno al cardenal Camillo Ruini, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana y ex vicario de Juan Pablo II para la diócesis romana. Ruini dedicó su sermón al recuerdo de Karol Wojtyla, pero sus palabras parecieron una invitación al continuismo. Además de subrayar su relación personal, sugirió la necesidad de proseguir la tarea desarrollada por el difunto Papa.

El cardenal Ruini celebró la misa acompañado por el el arzobispo polaco Stanislaw Dziwisz, secretario particular de Wojtyla y principal promotor del proceso de beatificación.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_