Felipe Juaristi y Juanjo Olasagarre ganan el Premio de la Crítica en poesía y narrativa en euskera
Felipe Juaristi (Azkoitia, 1957), Premio Euskadi de Poesía en 1998 y de Literatura Infantil Juvenil en 2000, reconoce abiertamente que el poemario Begi- Izaiak (El temblor de los ojos) le ayudó a superar una depresión. "En él está mi dolor y el de la gente que conozco. Todo el dolor que veo en mi mundo, que es el del País Vasco, la muerte de mi amigo Imanol [el cantante]... Y muchas cosas que no olvido". En sus páginas dejó sus lágrimas y una poesía pesimista que ha conmovido a los especialistas y ahora le brinda una gran "satisfacción". La Asociación Española de Críticos Literarios reconoció ayer su trabajo con el Premio de la Crítica 2004 en la categoría de poesía en euskera. En la modalidad de narrativa, el galardonado fue el navarro Juanjo Olasagarre (Pamplona, 1964) por Ezinezko maletak (Maletas imposibles), su primera novela.
El poemario de Felipe Juaristi "es una exploración de la desolación, un libro de gran pesimismo que, sin embargo, confía en la palabra y la memoria", destacó ayer el jurado al hacer público el fallo en Sevilla. Pero frente a este pesimismo, frente a "la cárga trágica" que ve en Euskadi, reivindica el humor. "Creo que el problema de este país es que somos demasiado trágicos, nos damos mucha importancia, tenemos demasiado orgullo y no sabemos reirnos de nosotros mismos", dice.
El humor es precisamente la herramienta que utiliza Olasagarre en Ezinezko maletak, una sátira sobre la identidad vasca, la personal y la sexual. En él aborda uno de sus temas más recurrentes: la separación de los jovenes de una cuadrilla. "Siempre me ha interesado explorar las huellas que deja el tiempo y la historia en la gente y eso es lo que he tratado de contar", explicó el autor al presentar el libro.
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