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Nace una red ciudadana para luchar contra la especulación

Javier Martín-Arroyo

El urbanismo en Andalucía, desarrollado a velocidad de vértigo y a menudo de manera agresiva en las últimas décadas, generó ayer la última respuesta ciudadana: la Red Andaluza en Defensa del Territorio. Esta red que coordinará a más de 300 asociaciones de agricultores, ecologistas y vecinales, fue constituida ayer en Málaga para luchar contra la especulación del territorio.

La unión de estos colectivos surge de "la necesidad de hacer frente a los especuladores, contra los que no pueden luchar los agricultores". Colectivos de las ocho provincias andaluzas se reunieron ayer para coordinar a partir de ahora sus protestas medioambientales y conseguir una mayor repercusión.

Inmaculada Nieto, de la asociación Acuíferos Vivos, acudió a la cita para denunciar que las extracciones de agua subterránea, la única disponible en Almería ante la escasez de ríos, han sido excesivas y se ha traspasado un límite. "Como se extrae más agua de la que llueve se está agotando, y sólo nos queda presionar para que la Junta reaccione de una vez y detenga esta sangría". Nieto tuvo que dejar de beber el agua del pozo de su familia, al que habían acudido durante generaciones, debido a la agricultura intensiva. "Existe un movimiento especulativo con la duplicación de desalinizadoras para los regadíos", se lamenta.

La nueva cultura del agua deberá luchar también contra la proliferación de campos de golf, según la plataforma. "En Villanueva del Rosario (Málaga) hay previstas 1.000 nuevas viviendas y un campo de golf que supone el consumo de agua de 15.000 personas, en un pueblo con sólo 2.000 personas y restricciones de agua en verano", ejemplificó Juan Calvente, portavoz de la coordinadora.

Dejación pública

"Existe un proceso especulativo vandálico que está saqueando los ecosistemas andaluces, creando precariedad laboral y desarrollando un modelo social marginal", criticó Calvente. Para los coordinadores la reacción de las administraciones no es suficiente para detener el abuso y negocio generado con la venta de suelo. "La Junta, las diputaciones y los ayuntamientos están haciendo con dinero de todos infraestructuras propicias para invertir a su alrededor dinero de procedencia ilegal", criticó.

Las cifras facilitadas señalan la construcción imparable en Andalucía, donde sólo en 2004 se comenzaron a construir 140.000 viviendas, más que en todo el Reino Unido. La coordinadora apuesta por la demolición de viviendas ilegales más que por quitar competencias urbanísticas a los ayuntamientos, tal y como propuso el presidente de la Junta Manuel Chaves recientemente. "Diálogo con la Junta no faltará por nuestra parte. Sin embargo, nos siguen hablando del protocolo de Kioto y de la nueva cultura del agua, pero las centrales térmicas y los campos de golf continúan proliferando", añadió Juan Miguel Camacho, también responsable de la plataforma.

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Sobre la firma

Javier Martín-Arroyo
Es redactor especializado en temas sociales (medio ambiente, educación y sanidad). Comenzó en EL PAÍS en 2006 como corresponsal en Marbella y Granada, y más tarde en Sevilla cubrió información de tribunales. Antes trabajó en Cadena Ser y en la promoción cinematográfica. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y máster de EL PAÍS.

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