Ibarretxe insiste en situarse en el centro de las "dos orillas" de Batasuna y PSE-PP

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, ofreció ayer a su público en Getxo (Vizcaya) su particular explicación de la permanencia del PNV en el poder durante 25 años. Y la basó en su reiterada tesis de que este partido ocupa la "centralidad" frente a las "dos orillas": la "coalición" PSE-PP por un lado, y la ilegalizada Batasuna por el otro. Mientras unos se niegan a aceptar la "voluntad del pueblo vasco", los otros "no acaban de exigir a ETA que acabe". Y por eso auguró, ante unas 3.000 personas convencidas, que los nacionalistas seguirán mucho tiempo en el Gobierno del País Vasco.

Ibarretxe trató, como suele hacer, de colocar su figura institucional por encima de las peleas políticas. Es más, a ratos lanzó un discurso casi filosófico-religioso, sobre todo cuando señaló: "No se construye nada con descalificaciones. Se construye con amor. Con amor y pasión hacia Euskadi. Se puede amar lo que se es sin odiar lo que no se es".

En todo momento, el lehendakari colocó al PSE y al PP a la misma altura, en una inexistente coalición similar a la que el PNV tiene con EA. Tanto que en un momento sostuvo: "Pensábamos que el cambio cuando desapareció Aznar y llegó Zapatero iba a traer mejores tiempos. Ya veis que seguimos con más de lo mismo, basado en ilegalizaciones, en sentar en el banquillo a la mesa del Parlamento, en amenazar el Concierto vasco". Ibarretxe no explicó quién plantea esto último, que no está en el programa de ninguno de los dos partidos constitucionalistas.

La idea más repetida de Ibarretxe, que tuvo que escuchar a ratos las protestas de una decena de militantes de Batasuna con un megáfono, es la de que el PNV se coloca en el centro de la sociedad vasca. Esto se refuerza con la insistencia en que tanto PP como PSE no son más que "sucursales de Madrid" que permiten que "Zapatero y Rajoy decidan en un despacho sustituir la voluntad del pueblo vasco".

Esta idea de la centralidad fue completada por el discurso de Juan María Atutxa, presidente del Parlamento vasco, quien resumió que "el frente del no, constituido por PP-PSOE y Batasuna, se ha unido en más de 100 ocasiones contra el Gobierno vasco". Atutxa también quiso recordar que los anteriores candidatos de PP y PSE, Jaime Mayor Oreja y Nicolás Redondo, han "desaparecido del mapa", mientras el PNV sigue con el mismo, Ibarretxe. Obvió que también los nacionalistas han cambiado su presidente, aunque no su cabeza de lista.

Fue el consejero de Justicia y dirigente de Eusko Alkartasuna, Joseba Azkarraga, el encargado de criticar con mayor dureza la decisión de anular la lista de Aukera Guztiak. "La coalición PP-PSOE se ha puesto de acuerdo para hacer trampas". Tanto Azkarraga como Atutxa concluyeron su discurso con el clásico "Gora Euskadi Askatuta" (Viva Euskadi libre). El lehendakari no lo hizo.