Medio Ambiente requiere al Ayuntamiento para que ajuste el zoo marino a la plataforma aprobada

Todo lo relativo al proyecto del zoo marino de Barcelona, en el territorio Fórum, resulta lento y laborioso. Después de años de que la plataforma proyectada chocara con la oposición del anterior Gobierno, en diciembre pasado se logró cerrar un acuerdo. El Ministerio de Medio Ambiente autorizó a que Barcelona avanzara la línea de costa junto al espigón de Prim para construir una plataforma de cinco hectáreas. Pero el asunto no está cerrado del todo, y en febrero pasado Medio Ambiente instó al consistorio para que ajuste el proyecto al espacio finalmente autorizado.

En la práctica, esta petición del ministerio es una demora añadida puesto que hasta que no se concluya toda la tramitación el Ayuntamiento, responsable de la obra, no podrá consolidar la nueva plataforma. "El 16 de febrero pasado, el ministerio envió una notificación al Ayuntamiento de Barcelona solicitando que reajustara el proyecto inicial al acuerdo definitivo que se alcanzó en diciembre", explica un portavoz de Medio Ambiente, para, a continuación, resumir: "Ahora "la pelota está en el tejado de Ayuntamiento". Cuando se le preguntó al consistorio por la citada notificación, un portavoz municipal señaló que "los reajustes están hechos y entregados a la Dirección de Costas de Barcelona", que depende del Ministerio de Medio Ambiente. Por ello situó la "pelota" en el tejado del Medio Ambiente. El consistorio no quiso precisar en qué consistían esos "reajustes" y se limitó a subrayar que se trata de cuestiones formales que no suponen ningún cambio sustancial.

El acuerdo alcanzado en diciembre hasta dibujaba las áreas del futuro zoo. Las 7,7 hectáreas que ocupará -las 5 pendientes de aprobación, sumadas a las 2,7 ya autorizadas en la época de los Juegos Olímpicos- se alinearán entre la Rambla de Prim y la calle de Josep Pla. Un extremo que ya modificaron los técnicos de Medio Ambiente fue la propia configuración de la plataforma del zoo para que el extremo situado hacia Levante, junto a una nueva playa que se creará, quede protegido por un espigón sumergido.

El zoo tendrá 90 especies marinas y propias de ecosistemas deltaicos. Habrá 20 tipos de mamíferos, 40 de aves, 23 de reptiles y 7 de anfibios. Se definirán cuatro ámbitos en franjas perpendiculares a la línea de costa y paralelas al espigón de Prim. La primera de ellas, la situada más al sur, será la de aguas oceánicas y en ella se ubicarán delfines, focas y pingüinos, entre otras especies. También en esa parte se localizarán las actividades educativas del nuevo zoo. La segunda, en dirección al Besòs, será el delta americano, con jaguares, cocodrilos, iguanas y varias especies de serpientes. La tercera será la del delta africano y en ella convivirán, por ejemplo, leopardos e hipopótamos. Por último, en el delta mediterráneo -junto al espigón de Prim- se construirá una de las instalaciones estrella del futuro zoo: un aviario de 2.000 metros cuadrados. Cada una de esas franjas tendrá un sistema de lagunas y marismas.