El padre de la niña muerta en un incendio provocó el fuego

El padre de la niña de cinco años que falleció intoxicada el lunes en el incendio declarado en su vivienda, en Alicante, confesó ayer a la policía que él mismo desató el fuego. José Rovira Quiles, de 51 años y recién separado de su mujer, dijo que quería suicidarse de esa forma y negó que buscara herir a la pequeña Yanira. Según su abogado, el hombre se encontraba "aturdido" y "fuera de sí" durante la declaración.

Los cuerpos de la menor y del padre fueron rescatados del interior de la vivienda por los bomberos. La niña había fallecido intoxicada por el monóxido de carbono. El padre fue dado de alta del hospital a mediodía de ayer. En calidad de detenido, declaró a la policía que antes de provocar el incendio, envió a la pequeña a casa de unos vecinos a por leche. Al observar la puerta abierta pensó, según la narración del presunto autor facilitada por su abogado, que la niña ya se había marchado. Entonces el hombre cerró las ventanas y atrancó la puerta de entrada al piso con muebles. Luego derramó gasolina para prenderle fuego. Según el detenido, cuando el humo ya se había extendido por toda la casa, descubrió que la niña se hallaba en el interior de la vivienda. José Rovira Quiles admitió que adquirió el combustible días antes en una estación próxima a su vivienda, un barrio humilde de la periferia de la ciudad. El presunto autor de los hechos comparece hoy ante el el juez.

Según su letrado, el hombre obtuvo la sentencia de separación de su mujer, el 28 de febrero de 2004. José Rovira Quiles fue absuelto por una denuncia por coacciones presentada por su mujer. Los vecinos de la pareja aseguran que el acusado amenazó en varias ocasiones con prender fuego al piso. El domingo pasado, Rovira celebró una cena de despedida con amigos.

El informe de los bomberos constata que el fuego se declaró en dos focos distintos.