El Gobierno limitará al 15% en el nuevo IRPF la deducción por compra de vivienda

El futuro de la deducción por compra de vivienda, el principal beneficio fiscal que disfrutan los contribuyentes, empieza a aclararse. El vicepresidente Pedro Solbes afirmó ayer que ve "relativamente razonable" la desgravación mínima actual del 15% en la cuota del IRPF para aportaciones anuales hasta de 9.015 euros. De esta forma, Solbes deja abierta la puerta a la supresión de la deducción máxima del 25% que se puede aplicar en los dos primeros años de la compra de un piso. Hacienda tiene previsto situar los tramos del IRPF entre dos y cuatro (ahora cinco).

Pocos detalles quiso dar Solbes sobre la reforma fiscal que ultima el equipo económico del Gobierno. "Se lo diré la semana que viene", respondió en una ocasión el ministro cuando fue preguntado sobre cuántos tramos tendrá el nuevo IRPF durante su participación en el Fórum Europa, organizado en Madrid por Nueva Economía y Europa Press. "Ni será uno, ni cinco", afirmó finalmente al respecto. Lo que sí tiene claro Solbes es que considera "razonable" el mínimo actual de desgravación por compra de vivienda.

La reforma fiscal que entró en vigor en 1999, y que se ha mantenido en la reforma de 2003 en lo que respecta a la vivienda, establece una deducción en la cuota del IRPF de entre el 15% y el 25%, tanto de los intereses como de la amortización del préstamo hipotecario, con un límite total de hasta 9.015,181 euros. Ese 25% se puede aplicar durante los dos primeros años desde la compra del piso sobre los primeros 4.500 euros; y el 15% sobre el resto, hasta esos 9.015,181 euros. A partir de los dos años, se sustituye ese 25% por un 20% en algunos casos (uno de ellos, cuando el importe financiado del valor de la adquisición supone al menos un 50% del valor).

Todo indica que la mencionada desgravación del 15% -desde hace meses se especula con la posibilidad de que se elimine- tiene el apoyo de Solbes. Pero el vicepresidente insistió en que quizás haya alguna "corrección" en estos beneficios fiscales, dando a entender de forma indirecta una posible supresión de las deducciones del 20% y el 25% en la cuota del IRPF. "No sé si habrá una corrección de ese tope [de 9.015 euros anuales], pero opino que no es una cifra incoherente, sino que puede ser tan válida como otra cualquiera", subrayó.

Hacienda tiene previsto revisar las deducciones fiscales en la próxima reforma del impuesto de la renta (IRPF), que entrará en vigor en 2006 (declaración en 2007). Y la que más polémica ha suscitado ha sido la desgravación por compra de vivienda. Recientemente, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó que la deducción por compra de piso se mantendría "esencialmente". Solbes dijo poco después que habría algunas "correcciones", y ayer añadió que considera razonable tener una deducción mínima por la vivienda. Sin embargo, todavía no hay nada cerrado al respecto y habrá que esperar para confirmar si finalmente Economía establece una tarifa plana en la deducción por vivienda.

La diputada del PP y ex secretaria de Estado de Presupuestos Elvira Rodríguez acusó ayer al Gobierno de generar "sobresaltos" entre las familias cada vez que realiza una declaración sobre las deducciones por vivienda, y afirmó que su partido es partidario de mantenerlas como están, informa Europa Press. Rodríguez indicó, en conferencia de prensa, que el Gobierno dice cada día una "cosa diferente" al respecto, lo que, en su opinión, no es bueno ni para las expectativas económicas ni para la marcha de la economía en general.

Mientras, el equipo económico del Gobierno da los últimos retoques a la reforma fiscal. Solbes confirmó ayer que se reducirá el número de tramos, de los cinco actuales a entre dos y cuatro. Además, no se descarta una reducción del tipo máximo del impuesto de sociedades (ahora en el 35%), aunque el Gobierno no está trabajando todavía en esa reforma, sino en la del IRPF, puntualizó Solbes.

Presidentes de privatizadas

No sólo de impuestos habló el vicepresidente. También de las empresas privatizadas. "No me encajan algunas elecciones de personas en algunas empresas privadas, por características básicamente profesionales", insistió Solbes, pero aseguró que corresponde a las compañías la toma de decisiones y el Ejecutivo no va a interferir. Respecto al reciente intento de la constructora Sacyr de hacerse con un puesto en el Consejo de Administración del BBVA, Solbes dijo que "el punto fundamental" de la operación, es decir, "la estabilidad" de la entidad financiera, "ha quedado bien resuelto".

Sobre la reforma laboral, Solbes confía en que haya un acuerdo cerrado con los sindicatos y la patronal de cara al verano, y se mostró partidario de revisar las condiciones de contratación.

En este sentido, la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) recomendó ayer al Gobierno español que rebaje "aún más" las indemnizaciones por los despidos de trabajadores fijos y que refuerce los controles para evitar los contratos temporales que no están justificados.