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Los ayuntamientos realizarán plenos de protesta para exigir más financiación

La FEMP reclama al Gobierno el pago de la "deuda histórica"

Carlos E. Cué

"Hasta aquí hemos llegado, estamos como en 1979". Francisco Vázquez, alcalde socialista de A Coruña y presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), mostró así su indignación por el problema de financiación de los ayuntamientos, y anunció, junto a las dos vicepresidentas, Rita Barberá (PP) y Rosa Aguilar (IU), que todos los municipios representados por esta organización realizarán el 19 de abril plenos extraordinarios de protesta en los que exigirán al Gobierno que les pague la "deuda histórica".

El 19 de abril es una fecha emblemática, porque fue en esa fecha, en 1979, cuando se constituyeron los primeros ayuntamientos democráticos desde la Guerra Civil. Por eso, la Comisión Ejecutiva de la FEMP, reunida ayer en el Senado, eligió esa fecha para mostrar su "cansancio", en palabras de Francisco Vázquez, porque nadie parece querer resolver el problema de la financiación municipal. Según diversos estudios, especialmente uno realizado por la federación catalana, los Ayuntamientos han acumulado desde 1979 una "deuda histórica" que corresponde al 30% de sus ingresos durante todos estos años. Rosa Aguilar, alcaldesa de Córdoba, pronosticó que la cifra podría ascender a 4.000 millones.

Esa deuda se produce, según los más de 8.000 municipios representados en la FEMP, porque los Ayuntamientos se ven obligados a hacerse cargo de cuestiones que no son de su competencia y para las que no tienen ningún tipo de dotación presupuestaria. Se trata sobre todo de atención social a personas desfavorecidas, a inmigrantes y, recientemente, de la aplicación de la ley integral de violencia de género. Según Aguilar, los ciudadanos acuden a los Ayuntamientos porque son las instituciones más cercanas. Las corporaciones, agregó, no pueden "desatender una necesidad urgente con el argumento de que no tienen competencias para hacerlo. Se ponen los medios aunque no haya dinero para ello. Y la deuda se acumula".

El socialista Francisco Vázquez fue tajante, incluso en las reivindicaciones de cara al Gobierno. "El 19 de abril diremos en todos los Ayuntamientos que estamos como al principio, en 1979. Vamos a decir que estamos cansados. Queremos decir: hasta aquí hemos llegado. Y además estamos convocando esos plenos extraordinarios desde el Senado, para dejar claro que la FEMP es una institución del Estado. La decisión está en manos del Gobierno", añadió en tono firme.

Prioridades

Vázquez, y después Rita Barberá, insistieron en que el Ejecutivo, y especialmente el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, no puede dar a las reformas de los Estatutos de Autonomía prioridad respecto al libro blanco que marcará la reforma del funcionamientos de los municipios. "Todo esto debe venir después de la solución de los problemas urgentes de los Ayuntamientos, y entre éstos el principal es el de la financiación", insistió Vázquez.

"Se está abriendo la negociación autonómica y especialmente la reforma de la financiación de la sanidad, y no se está negociando el asunto más urgente, que es la deuda histórica de los ayuntamientos", señaló Barberá. "El libro blanco está escondiendo el asunto clave real, que es la financiación", insistió la alcaldesa de Valencia.

Rosa Aguilar aseguró que sobre este asunto hay "unanimidad en el municipalismo", sin diferencias entre los principales partidos. "Sin financiación suficiente, sin acuerdos sobre la deuda histórica, el libro blanco no será nada", concluyó.

Los plenos extraordinarios tendrán un único punto en el orden del día: la adhesión a la llamada declaración de Vitoria, en la que se exige al Ejecutivo que se haga cargo de esa deuda histórica y resuelva definitivamente el problema de la financiación local. Esta convocatoria de plenos simultáneos no tiene precedentes, según la FEMP.

Los Ayuntamientos aseguran que están ahora especialmente ahogados porque no han recibido una compensación suficiente tras la desaparición del Impuesto de Actividades Económicas (IAE), cuyo cobro suponía una parte significativa de sus ingresos.

De izquierda a derecha, Rita Barberá (PP), Francisco Vázquez (PSOE) y Rosa Aguilar (IU), en el Senado.
De izquierda a derecha, Rita Barberá (PP), Francisco Vázquez (PSOE) y Rosa Aguilar (IU), en el Senado.EFE

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