La abstención, clave en el referéndum de la Constitución europea
La participación. Ésta es la clave del referéndum sobre el tratado de la Constitución europea que se celebra hoy. Será el sexto referéndum que tiene lugar en Andalucía desde 1976, de los cuales dos han sido específicos de la comunidad (en 1980 y 1981, sobre el Estatuto de Autonomía). Tres de los cuatro partidos con representación en el Parlamento andaluz (PSOE, PP y PA) han pedido el sí a lo largo de la campaña, aunque los andalucistas han dicho que se trata de un "sí crítico". Izquierda Unida ha sido la única formación que ha reclamado el no. Seis millones de andaluces están llamados a las urnas.
La campaña andaluza sobre el tratado constitucional europeo arrancó con cierta polémica toda vez que el presidente de la Junta, Manuel Chaves, se encontraba de viaje institucional por Centroamérica. En concreto, el día que empezó la campaña, Chaves llegó a Cuba, mientras que el presidente del PP, Javier Arenas, estaba en Bruselas, donde mantuvo una reunión con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.
Tras una reunión con Fidel Castro, Manuel Chaves hizo unas declaraciones sobre una posible visita del Rey y del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a la isla caribeña a las que el PP se ha agarrado como a un clavo ardiendo para criticar al presidente de la Junta. Chaves quiso zanjar el asunto reconociendo que sus palabras fueron "inadecuadas", pero el PP ha querido estirar la polémica como un chicle y llegó a encargar una encuesta en la que se preguntaba sobre este asunto.
Otro asunto que ha caracterizado la campaña ha sido el pacto final que han alcanzado los tres grupos firmantes del acuerdo del impulso democrático, del que se descolgó el PP. Entre otras cuestiones, los grupos acordaron el Estatuto de los ex presidentes de la Junta, que fijó la pensión máxima que percibirán quienes hayan ostentado este cargo en 42.000 euros (cantidad de la que hay que deducir la pensión pública). El PP también ha intentado a lo largo de la campaña estirar esta polémica, hasta el punto de presentar una propuesta de pensión para los ex presidentes de la Junta que llegaba a los 72.000 euros de acuerdo con los criterios que este partido había utilizado en las últimas semanas.
Los socialistas han acusado al PP de no implicarse a fondo en esta campaña de la Constitución europea y de estar pidiendo el sí con la "boca pequeña". Aunque los populares lo han negado y han defendido que su postura es clara, lo cierto es que entre los dirigentes del PP está instalada la creencia de que sus bases y su electorado pueden utilizar el referéndum para intentar castigar al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. De hecho, el eurodiputado Jaime Mayor Oreja, en un acto celebrado en Sevilla, emplazó a sus militantes a dejar a un lado la "tentación" de dar un "puntapié" a Zapatero el día del referéndum.
En la última semana de campaña, el presidente andaluz ha celebrado mítines en casi todas las provincias destacando la importancia del referéndum y el papel de la Unión Europea en el progreso de la comunidad. De hecho, ha equiparado la relevancia de la Constitución europea con la Constitución española y el Estatuto de Autonomía, todo con el fin de animar a la participación en el referéndum de hoy, el principal fantasma que puede ensombrecer este 20-F. El PP, que ha hecho un despliegue de medios inferior al del PSOE en esta campaña, también cerró el viernes con un mensaje a favor de la participación. IU ha pregonado el no por toda Andalucía porque, en su opinión, la Constitución europea refleja sólo el modelo liberal. Por su parte, el PA ha defendido el sí, pero un "sí, crítico" con el modelo elegido.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.