El Museo Reina Sofía presenta sus dos nuevas obras de Braque
La ministra de Cultura, Carmen Calvo, presentó ayer las últimas adquisiciones del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Botella y frutas y Naipe y dados, dos cuadros cubistas de 1911 y 1914, respectivamente, de Georges Braque (1882-1963), uno de los maestros de esta corriente pictórica de principios del siglo XX junto a Pablo Picasso y Juan Gris, y dijo que es "una forma de hacer museo en el nivel de excelencia".
Las pinturas adquiridas por tres millones y medio de euros, que pasan a formar parte de la colección del Reina Sofía, pertenecen a cada uno de los periodos del cubismo, el analítico (Botella y frutas) y el sintético (Naipe y dados), explicó la directora del MNCARS, Ana Martínez de Aguilar, en la presentación.
Carmen Calvo destacó que la compra de ambos lienzos se ha podido llevar a cabo en cumplimiento de la reserva cultural del 1% aportada por el Ministerio de Medio Ambiente, mecanismo contemplado en la legislación del patrimonio histórico, y agradeció al departamento del que es titular Cristina Narbona y a la Junta de Calificación por haber posibilitado esta "adquisición espectacular".
La ministra de Cultura comenzó su intervención con unas palabras de "contestación" al acto terrorista del miércoles en las cercanías de la sede de Arco horas antes de la apertura de la feria. "Contestamos con Braque", dijo Carmen Calvo, refiriéndose a "la normalidad de nuestras vidas y a la paz y la belleza que representan estas obras" , y comentando a propósito del coche bomba: "Ése no es el camino".
Carmen Calvo se refirió al "momento histórico" que vivió ayer el Reina Sofía, por la importancia de las compras, y dijo que "hay que llenar la ampliación con calidad, rigor y cordura" para conformar una colección mucho más importante, buscando lo que sea necesario para dotar a este gran centro de arte contemporáneo.
La aparición del cubismo es uno de los momentos más extraordinarios de la historia del arte, es fundamental en las vanguardias y una auténtica revolución después del Renacimiento. Con esta adquisición comienza a perfilarse uno de los núcleos fundamentales en los que debe basarse la colección del museo, dijo la directora del Reina Sofía. Martínez de Aguilar destacó que con estas dos obras de Braque la presencia del cubismo en las salas del museo "se ve realmente enriquecida", gracias al diálogo Braque-Picasso y al conjunto de pinturas de Juan Gris, "un trío de ases".
Picasso y Braque se conocieron en 1907 en el estudio del pintor malagueño donde trabajaba en Las señoritas de Avignon, obra fundamental del cubismo. Ambos artistas crearon un lenguaje nuevo y mantuvieron una amistad enriquecedora en la que intercambiaron sus reflexiones e innovaciones, aunque nunca pintaron juntos.
El presidente del patronato del Museo Nacional Reina Sofía, Juan Manuel Urgoiti, destacó que la jornada es una ocasión excepcional que completa el diálogo de los tres grandes cubistas, y calificó la adquisición de las obras de Bracomo "un momento ilusionante".
