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Javier Arenas dice que el gran reto para Andalucía es dejar de ser región objetivo uno de la Unión Europea

Ginés Donaire

El PP celebró ayer en Jaén sus actos centrales a favor del voto afirmativo en el referéndum sobre la Constitución europea con la presencia del presidente regional, Javier Arenas, y el eurodiputado Cristóbal Montoro. Los dos coincidieron en que el gran reto de Andalucía es dejar de ser región objetivo uno, denominación de la UE para aquellas zonas con una renta inferior al 75% de los ingresos medios europeos.

Al igual que hiciera el domingo Ángel Acebes, Arenas también se quejó de las "agresiones dialécticas" del Gobierno de Rodríguez Zapatero hacia el PP y hacia la iglesia católica.

Arenas, que responsabilizó al presidente andaluz, Manuel Chaves, de que la campaña del referéndum sea "de baja intensidad", criticó al PSOE porque, a su juicio, "brinda todos los días con champán" porque Andalucía sigue siendo objetivo uno dentro de la Unión Europea. El presidente de los populares andaluces señaló en Jaén que el "gran argumento" de su partido en la campaña del referéndum del 20-F va a ser, precisamente, la necesidad de que Andalucía abandone esa catalogación, que se le da a las comunidades con la renta más baja de la Unión Europea. "Nosotros queremos brindar porque Andalucía deje de serlo", enfatizó Arenas, quien, no obstante, añadió que hasta que llegue ese momento el PP-A defiende que se mantengan los fondos para Andalucía. En ese sentido, Arenas advirtió del "riesgo" que tiene la comunidad andaluza de perder más de 4.000 millones de euros en las siguientes perspectivas financieras comunitarias.

A este tema se refirió también el eurodiputado popular y ex ministro de Hacienda, el jiennense Cristóbal Montoro, que reclamó de los gobiernos socialistas en Madrid y en Sevilla "políticas de desarrollo y empleo" para que a Andalucía no se le vea como una región "receptora de subsidio". Montoro indicó que el referéndum se había convocado "con demasiada precipitación y aceleración", máxime al tratarse de un asunto "complejo", algo que, en su opinión, "ha desanimado a los ciudadanos". Tanto Montoro como Arenas abundaron ayer en las críticas vertidas el domingo por el secretario general del PP, Ángel Acebes, hacia el PSOE por su "obsesión" hacia los populares y hacia la iglesia católica. Arenas lamentó las "agresiones dialécticas" del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "contra el PP y contra los católicos", al tiempo que recordó que "son los socios de Gobierno del PSOE los que dicen no a la Constitución". "El PP dio su apoyo gratis al Gobierno contra el plan Ibarretxe, mientras que sus socios independentistas respaldaron el plan. Y son esos socios los que ahora son antieuropeos", subrayó el presidente del PP.

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