"El cambio en la deuda de Mintra obedece a motivos políticos"

El despacho de Ignacio González en la Puerta del Sol, sede del Gobierno regional, está lleno de pequeñas fotos: de él con sus tres hijas, con su mujer, con sus tres secretarias, con Esperanza Aguirre, con José María Aznar y con el Rey. También, sobre una repisa, se ve un tricornio de la Guardia Civil reluciente. "Me lo regalaron cuando dejé mi cargo en el ministerio [fue delegado del Gobierno para la Extranjería y la Inmigración con Ángel Acebes como ministro del Interior]".

Pregunta. Bruselas ha decidido que la deuda de Mintra, la empresa con la que construyen el metro, debe ser contabilizada como deuda de la Comunidad. Eso eleva el endeudamiento a los 10.000 millones. Menuda carga, ¿no?

"El cambio de calificación de la deuda de Mintra no obedece a motivos económicos, sino políticos, para poner a prueba nuestra gestión"

"Lo que nos preocupa es que la Ley Especial para Madrid sea muy ambiciosa e incluya conceptos que no están precisados"

Respuesta. Nosotros no tenemos comunicación oficial de esta resolución. Sólo sabemos que Mintra hasta ahora estaba calificada como empresa comercial por parte de Bruselas [por lo que su deuda de 3.600 millones no se imputaba a la Comunidad]. Al parecer, hay un intento de cambiar esta calificación. Desde el primer momento advertimos al Gobierno de Rodríguez Zapatero que no había razones, porque Mintra sigue siendo la misma.

Nos sorprendió que el ministro Pedro Solbes dijese que le preocupaba Mintra, cuando fue él, cuando era comisario europeo, quien la calificó como empresa comercial. No entendemos por qué ahora cambia de criterio y no entendemos por qué Almunia [nuevo comisario] no apoya que siga siendo empresa comercial.

P. ¿Esta decisión es aplicable a otras empresas públicas?

R. No lo sé, pero sólo lo han hecho con nosotros [la Comunidad de Madrid]. El Gobierno de España debe defendernos, porque sin haber cambiado las circunstancias de Mintra, ahora parece que tiene dudas. Eso tiene una mala explicación y, a lo mejor, responde a una estrategia política de ataque a la Comunidad. Tenemos que condenarlo. Además, pedimos explicaciones a Zapatero y a Solbes de por qué lo que defendieron en su momento ahora no vale. La presidenta se lo ha dicho a Zapatero. Espero que el Gobierno tome medidas. No vamos a consentir que esto afecte a nuestros compromisos electorales si esto responde a una estrategia política.

P. ¿Pero les puede afectar?

R. No, porque seguiremos adelante. Nos empieza a preocupar que el Gobierno central haya recortado un 25% el presupuesto en infraestructuras destinado a la Comunidad. Si esto es un intento de parar el crecimiento o el desarrollo de Madrid, no lo vamos a consentir. Llevaremos adelante las infraestructuras prometidas, porque son estratégicas. No vamos a paralizar nada, porque es perjudicar a los ciudadanos de una manera absurda por intereses políticos.

P. ¿Y cómo lo van a hacer si ahora la deuda es muy elevada?

R. Pediremos al Gobierno que no cambie la calificación. Si la cambia, haremos un plan financiero para llevar adelante el metro. Pretenden que Madrid haga un esfuerzo económico que el Estado no hace. Parece que quieren que afecte al endeudamiento de la Comunidad con un solo objetivo: no un objetivo económico, sí un objetivo político.

P. ¿Por qué va a hacer eso el Gobierno central?

R. La Comunidad puede, dado su saneamiento financiero, hacer frente a dos o tres punto más de deuda. No es un problema económico: es un problema político para poner en cuestión nuestra gestión económica. Haremos las operaciones necesarias para llevar a cabo el metro, y esto no afectará al resto de servicios. Si es necesario, no descartamos cualquier medida económica en Mintra. Si tenemos que transformar su naturaleza, lo haremos.

P. Habla usted de la Comunidad como objetivo político del Gobierno central.

R. Salvo que alguien me lo explique, no entiendo las razones para cambiar de criterios contables con Mintra. Si no es una razón económica, ¿cuál es la razón? Si no hay motivos económicos, serán políticos.

P. El alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, presentó al ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, un borrador de la Ley Especial para Madrid.

R. (Fuerza la sonrisa) Es una ley importante y vamos a colaborar para que exista. Requiere, lógicamente, de un procedimiento que necesita un acuerdo político, tanto de los grupos con representación en el Ayuntamiento, como en la Asamblea.

P. Ruiz-Gallardón se la entregó al ministro.

R. La Comunidad debe ser partícipe. El ministro me dijo que Gallardón le pidió una entrevista para decirle que tenía interés en sacar adelante el texto y que quería hacerlo aprovechando la ley que Barcelona lleva mucho tiempo tramitando. Sevilla me aseguró que el alcalde le entregó un texto que, en términos diplomáticos, se llama un no papers, un borrador para que tuviera conocimiento de las líneas generales, pero sin valor oficial.

P. ¿El alcalde se lo comunicó a ustedes?

R. No.

P. ¿Eso qué le parece?

R. Ni bien ni mal. La ley necesita la participación de la Comunidad y vamos a pedir que haya consenso político entre los miembros de la Cámara regional. Es una ley que necesita el acuerdo de la Asamblea.

P. ¿Cómo se enteran de la existencia del borrador?

R. Tenemos conocimiento a partir de que se produce una contestación del presidente Rodríguez Zapatero a un diputado de Convergència i Unió que le preguntaba sobre cómo estaba el asunto de la Ley de Barcelona. El Gobierno le responde que hay una comisión tripartita y que espera que se pueda aprobar en el primer trimestre. Zapatero hace, además, una alusión a que Madrid puede seguir el mismo proceso y aprobar su ley. Antonio Beteta, nuestro portavoz en el Asamblea, se entera y me lo comenta.

P. ¿Qué ocurre después?

R. Con motivo de un encuentro casual con Jordi Sevilla, le pregunto sobre la respuesta de Zapatero y cuál es la previsión del Gobierno. Me explica que ha tenido un reunión informal con el alcalde y que no hay nada oficial. Esto fue a finales del año pasado. A partir de ahí, se produce el contacto con el alcalde. Se lo pregunto al vicealcalde, Manuel Cobo, y es a raíz de esta situación, a principios de enero, cuando Ruiz-Gallardón manda una carta a la presidenta con el texto.

P. ¿Qué le parece el borrador?

R. Lo estamos estudiando en profundidad y no hemos tenido tiempo: nos llegó a principios de enero, le repito, y luego se produjo el viaje de la presidenta a China. De todas formas, lo que nos preocupa es que es una ley muy ambiciosa e incluye conceptos que no están precisados, lo que puede afectar a la arquitectura institucional de la Comunidad. Tenemos un sistema de ordenación territorial y competencial que está establecido en la Constitución y en el Estatuto. En la medida en que no tiene precisión clara en algunos conceptos, nos preocupa. A partir de ahí, estamos viendo cuál es la filosofía del tema. No es una cuestión de estar a favor o en contra, sino de tener las precisiones.

P. Ha hablado usted del viaje de la presidenta a China. Allí se encontró con una delegación del Ayuntamiento...

R. Conocíamos la intención del Ayuntamiento, pero la naturaleza de ambos viajes no era la misma. La Comunidad lo tenía preparado desde hacía tiempo en colaboración con los empresarios y la Cámara de Comercio. Nuestro viaje tenía un contenido institucional. El Ayuntamiento asistía sólo a una feria comercial en Shanghai. Eran complementarios.

P. Defina a Rafael Simancas, secretario regional del PSOE.

R. Es un buen líder de la oposición, que está haciendo muy bien su papel. Me parece que trata de sacar alguna ventaja desde el punto de vista institucional por su cercanía al Gobierno, pero ahí se equivoca. Eso no es bueno para él, para la Comunidad, ni para nadie. Ha cometido el error de que pensaba que podía sacar algo. Una vez habló de que había un plan Zapatero para Madrid, pero ese plan no existe, ni se le ve.

P. Su opinión sobre IU.

R. Es la federación de partidos más grande que he conocido. El problema es que tiene nueve diputados y ocho corrientes. No cabe duda de que así es difícil trabajar.

P. ¿Me da su opinión sobre la carta del secretario de Distritos del PP, Ángel Garrido, movilizando a las bases del partido a manifestarse contra los socialistas por excarcelar etarras? En la manifestación se zarandeó a José Bono.

R. No conozco la carta. A mí no me llegó.

P. ¿No la conoce?

R. No. De todas formas, condeno cualquier tipo de insulto o agresión. Lo que no entiendo es por qué, si a todos [los políticos] nos convocaron en un lugar y hora determinada para facilitar la organización y el control de la manifestación, Bono decida ir por libre y entrar por un lugar no establecido. Pero lo que me parece impresentable es que la policía detenga a unos ciudadanos sin ningún tipo de pruebas y pueda imputarles un delito. Es gravísimo. La policía no hace este tipo de actuaciones si los mandos no se lo ordenan.