El Papa reaparece en público tras cinco días en el hospital

Juan Pablo II reapareció ayer en público, cinco días después de ser hospitalizado por problemas respiratorios, y afirmó que desde su cama de enfermo continuaba "sirviendo a la Iglesia y a la humanidad entera". El Pontífice se asomó a una ventana del policlínico donde está ingresado, el Gemelli, protegido por un cristal, e impartió con voz ronca y quebrada su bendición al término del Angelus.

El Pontífice fue saludado con júbilo por centenares de personas congregadas junto al centro hospitalario y aplaudido por una multitud en la plaza de San Pedro, donde habían sido instaladas grandes pantallas de televisión.

La imagen de Karol Wojtyla y sus palabras parecieron confirmar que remitía definitivamente el proceso gripal que obligó a ingresarle en el policlínico Gemelli el martes por la noche. La audiencia general del próximo miércoles estaba suspendida, pero los médicos sugerían que, salvo complicaciones, el Papa podría regresar a su residencia habitual durante esta semana.

La homilía papal fue leída por el cardenal argentino Leonardo Sandri, sustituto de la Secretaría de Estado (cargo equivalente al de ministro de Asuntos Exteriores) y número tres del Vaticano. En Italia se celebraba la Jornada de la Vida y Juan Pablo II dedicó su mensaje a deplorar el aborto. "Fe en la vida piden silenciosamente los niños aún no nacidos", declaró, por boca del cardenal Sandri.

También expresó su apoyo a los obispos italianos, que de forma muy poco encubierta recomiendan estos días a los fieles que no voten en el próximo referéndum sobre la ley de reproducción asistida, con el fin de que participe menos del 50% del electorado y la consulta fracase por no alcanzarse la participación exigida.

Vocación de servicio

"Entre otros enfermos, a los cuales dedico un recuerdo afectuoso, sigo sirviendo a la Iglesia y a la humanidad entera", afirmó finalmente Juan Pablo II. Y dio gracias a todo el personal del policlínico Gemelli y a todos los que habían rezado por su restablecimiento.

Frente al centro hospitalario, cientos de personas vitoreaban al Pontífice. Un grupo de jóvenes toledanos entonó repetidamente la frase "Juan Pablo II te quiere todo el mundo", mientras otro grupo de muchachas italianas de la Acción Católica hacían eco con "Giovanni Paolo". Había quien lloraba de emoción. El número de periodistas y de cámaras de televisión era impresionante.

En la plaza de San Pedro se celebró la misa dominical y se asistió por televisión a la reaparición del Papa, acogida con un gran aplauso. "Desde el policlínico Gemelli se ha alzado hoy un puente que se extiende a Italia y al mundo entero", proclamó el cardenal Camilo Ruini, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana y oficiante de la ceremonia vaticana.