Lipassam

Soy vecino de la calle Virgen de Belén, en Los Remedios, y el motivo por el cual escribo es la tremenda suciedad que sufrimos de un tiempo a esta parte y que Lipassam parece no estar dispuesto a poner remedio. El caso es que el barrendero, supuestamente encargado de adecentar la calle se pasa hasta cuatro días sin hacer acto de presencia, lo cual es lamentable e irritante. Durante ese periodo de tiempo una papelera está rota, un andamio abandonado, desperdicios que dejan los gamberros que sólo pisan la calle para fastidiar al prójimo y amén de aquellos maleducados, por no llamarles algo más fuerte, que utilizan la calle como WC. Mencionar también el deplorable estado de los naranjos, no se podan, no se recogen las naranjas, en definitiva, un desastre, pero como la cosa no acaba ahí, mi madre está harta de llamar a la empresa para que se tomen medidas, éstas llegan de cuando en cuando con tal de contentarnos como si nosotros fuéramos unos estúpidos que protestan por protestar, nos envían una carta asegurando que se han establecido mejoras, y lo cierto es que todo esta hecho un asco. Tengo motivos más que suficientes para contar más cosas con tal de que se les caiga la cara de vergüenza a los responsables de este servicio municipal, sin embargo, prefiero aguardar a que esta carta pueda ser el inicio de una época de mejor y mayor limpieza en Los Remedios, barrio del que parece que nuestro alcalde se acuerda sólo cuando llega la Feria.