Un marroquí denuncia a 4 guardias urbanos de Santa Coloma por agresión

Un joven marroquí residente en Santa Coloma de Gramenet ha presentado una denuncia contra cuatro agentes de la Guardia Urbana de esta ciudad en la que les acusa de haberle propinado una paliza. Fuentes de este cuerpo policial niegan la acusación, aunque admiten que entre los agentes y el joven se produjo un forcejeo porque éste se negó a entregarles una navaja de grandes dimensiones.

Los hechos denunciados ocurrieron el pasado miércoles en el número 37 de la calle de los Pirineus de Santa Coloma de Gramenet (Barcelonès), en una casa abandonada en la que dormía el joven de nacionalidad marroquí Driss Cherrouda. Según su relato, a primera hora de la mañana le despertaron tres trabajadores de una empresa de derribos que se disponían a demoler el edificio en el que había pasado la noche.

En la denuncia se explica que esos trabajadores portaban unos palos y que se produjo un forcejeo con ellos. Al parecer Cherrouda también llevaba un arma blanca y eso generó temor entre los trabajadores pertrechados con palos a que se pudiera producir una agresión. El joven marroquí admitió que llevaba ese arma blanca. "Siempre duermo con una navaja", confesó. En cualquier caso, Cherrouda abandonó el edificio sin que la discusión con los trabajadores llegase a más. Lo que no sabía es que fueron a denunciarle ante la Guardia Urbana.

Denuncia previa

Momentos después de marcharse del edificio, el marroquí fue detenido por cuatro agentes de la policía municipal a raíz de la denuncia presentada por los trabajadores. Cherrouda relata que los agentes, sin mediar palabra, empezaron a insultarle y le propinaron una paliza. La versión de la Guardia Urbana niega ese relato de los hechos. Fuentes de este cuerpo policial aseguraron que el marroquí se resistió a entregarles una navaja de 22 centímetros de hoja que llevaba y que, efectivamente, se produjo un forcejeo con él.

El joven fue trasladado al hospital del Espíritu Santo de Santa Coloma. En el parte médico se refieren contusiones y una cervicalgia. El marroquí asegura que la agresión se produjo sin mediar palabra. "La Guardia Urbana no me preguntó ni me pidió la documentación", asegura.

La denuncia la ha tramitado al Juzgado de Instrucción número 6 de Santa Coloma de Gramenet, que ahora deberá acordar si la archiva o la admite a trámite.