Plata vaticina un gran año turístico con un crecimiento superior al 5,5% respecto a 2004
La Junta cree que la recuperación mundial puede elevar el número de visitantes hasta el 7%
Una capa de optimismo envolvió ayer el pabellón de Andalucía en la primera jornada de la Feria Internacional de Turismo de Madrid, Fitur 2005. En la pasada edición de la feria, 2004 se aventuró como un ejercicio difícil, pero el sector ha superado con creces las expectativas: el año pasado la llegada de turistas aumentó el 2,7% y se superó por primera vez los 22 millones de visitantes a la comunidad, si bien los ingresos económicos no crecieron. El consejero de Turismo, Paulino Plata, pronosticó ayer que 2005 será un gran año turístico, con un margen de crecimiento de entre el 5,5% y el 7%.
El consejero no obstante matizó que los pronósticos hay que tomarlos con cautela, dado que la actividad turística es especialmente sensible a condicionantes ajenos como el clima geopolítico o cualquier pequeño vaivén en la coyuntura económica. Las previsiones optimistas del Sistema de Análisis y Estadísticas del Turismo en Andalucía (Saeta) están fundamentadas principalmente en la evolución del movimiento hotelero, que en la comunidad supone el 52% de la actividad turística total. En 2004 las pernoctaciones en los establecimientos hoteleros andaluces aumentaron un 5,7%.
Las previsiones más globales también juegan a favor. La Organización Mundial del Turismo prevé un incremento general de los viajes del 4%, y además, el año 2004 deja apuntes "esperanzadores", según Plata, como un cierto repunte en la afluencia de turistas alemanes. En general, se espera una cierta recuperación de las economías europeas, ya que los resultados del ejercicio pasado estarán muy condicionados por la escalada de los precios del crudo, que desde octubre se han estabilizado.
No obstante, los técnicos del sistema estadístico de la Consejería de Turismo entienden que será el mercado nacional, del que procede el 59% de los turistas que visitan Andalucía, el que sustente primordialmente el fuerte crecimiento previsto, manteniendo la tendencia de los últimos años. En 2004 las pernoctaciones de los turistas españoles en hoteles andaluces aumentaron un 16%. Uno de cada cinco españoles que viajan dentro del territorio nacional lo hace a Andalucía. Por ello, Plata explicó que el mercado nacional será el objetivo prioritario de las estrategias de promoción que diseña su departamento con campañas que tengan como destinatario directo el consumidor, ya que el 83% de los viajeros españoles programa sus vacaciones personalmente.
El consejero anunció además que para próximas ediciones de Fitur, Turismo Andaluz programará actividades para los dos últimos días de la feria, que está abierta al público, y no sólo cuidará las jornadas estrictamente profesionales. En la primera jornada de la feria, Plata insistió machaconamente en la importancia de que todos los productos turísticos andaluces tengan una adecuada y atractiva comercialización en Internet.
Uno de los datos negativos del balance de 2004 es el descenso en el grado de ocupación media de las plazas hoteleras, 50,22%, frente al 51,9% del año anterior. La Consejería de Turismo, sin embargo, atribuye este fenómeno al aumento de camas, un 10% a lo largo del ejercicio, que en términos absolutos suman 18.877 más. La Consejería entiende que las grandes cadenas no se aventurarían a realizar estas inversiones si los estudios de mercado no les ofrecen oportunidades claras de negocio.
Más hoteles
El consejero aseguró que es el propio mercado el que tiene que autorregularse, y resaltó que el 46,2% de las plazas se localizan ya en hoteles de cuatro y cinco estrellas que obtienen índices de ocupación más elevado de la media. "Lo importante es que los hoteles que se abran tengan valor añadido, al cliente le da igual una cama u otra, al final lo que determina su decisión es la oferta complementaria y de servicios que tenga el establecimiento".
El mensaje optimista lo llevaron también a Fitur los alcaldes de las dos principales capitales andaluzas. El primer edil de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, recordó que en la ciudad se abrieron el año pasado siete hoteles con 700 nuevas plazas y que "las previsiones pesimistas que hablaban de sobreoferta no se han cumplido". Las pernoctaciones en la ciudad han aumentado un 6% y dos puntos la ocupación media. Para 2005 se anuncian 10 nuevos establecimientos. "El pesimismo es poco rentable, no ayuda a impulsar energías positivas y también se equivoca como lo demuestran las cifras del 2004".
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, también aludió a la pujanza como destino turístico de la ciudad, que dispone ya de 6.500 plazas hoteleras que se ampliarán hasta 9.000 con los proyectos en marcha. "No hay que tener miedo a que haya más oferta de hoteles", asintió en réplica al presidente del Patronato Provincial de Turismo, Juan Fraile, quien el pasado lunes aseguró que la zona no puede sostener el actual ritmo de crecimiento de la oferta hotelera.
Propuesta única
La Consejería de Turismo se ha cuidado mucho de dar una imagen de auténtica unidad en la primera edición de Fitur en la que tiene al frente a un consejero socialista. Y no sólo en la imagen promocional, con un expositor que mantiene un diseño único en los 5.225 metros cuadrados, y que sólo ha dejado a los patronatos provinciales que decidan la ubicación de los mostradores y la organización del espacio que dispone cada uno.
La unidad también es institucional. El consejero, Paulino Plata, estuvo acompañado de los presidentes o gerentes de los ocho patronatos provinciales en la cinta de inauguración del pabellón y los alcaldes de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE) y de Málaga, Francisco de la Torre (PP) completaron la foto del estrado.
Los programas de cada uno de los expositores dentro del pabellón andaluz guardaron además escrupulosamente un orden cronológico para no solaparse, a diferencia de lo ocurrido en años anteriores. La inauguración tuvo así un marcado carácter institucional y profesional.
En la jornada inaugural de Fitur, cobró un protagonismo especial la inauguración del expositor de los Juegos del Mediterráneo que se celebrarán en Almería este verano, la cita deportiva más importantes del año en España. El comité organizador, presidido por Juan Megino, ha montado en Fitur un expositor propio junto al de Andalucía, que fue inaugurado por la infanta doña Pilar de Borbón y el consejero Paulino Plata. Fue el momento donde se dispararon más flashes, por la presencia de tres de los cuatro embajadores de los Juegos, el golfista Sergio García y los ex campeones olímpicos de 1.500 metros y de vela, Fermín Cacho y Teresa Zabell. El cuarto, el futbolista del Real Madrid Zinedine Zidane, casado con una almeriense, no pudo asistir.
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