Un hombre de 21 años mata a puñaladas a su mujer en Vélez-Malaga
En Toledo, un hombre se suicida después de asesinar con una escopeta a su ex esposa
Un hombre de 21 años, J. D. J., fue detenido ayer tras haber apuñalado la pasada madrugada a su esposa de 22, I. M. C., en su vivienda de la localidad de Vélez-Málaga y trasladado su cadáver al aparcamiento del edificio en el que residían. Otro hombre, Floro D. V., de 63 años, asesinó a tiros en la tarde de ayer a su ex esposa, María M. G. F, de 61, en la localidad toledana de Aldeanueva de Barbarroya (Toledo) y luego se suicidó. Con éstas son cuatro las mujeres víctimas de la violencia machista en lo que va de año.
El cuerpo semidesnudo de I.M.C., que presentaba heridas con arma blanca y síntomas de estrangulamiento, fue hallado a las 8.40 horas de la mañana por un vecino en el garaje del bloque en el que la víctima vivía con su marido en Vélez Málaga. Sin embargo, la policía confirmó que la agresión se produjo en el interior de la vivienda y que el cuerpo de la joven fue trasladado luego al aparcamiento. En el ascensor había restos de sangre.
J. D. J., marido de la víctima, fue apresado por la Policía Nacional en las inmediaciones del edificio, tras ofrecer resistencia a los agentes. El presunto asesino se ha declarado autor de los hechos y ha pasado a disposición judicial, informaron ayer fuentes policiales.
Según aseguraron los vecinos, la pareja se peleaba con frecuencia. Los jóvenes, naturales de la población de Almayate (Málaga) se habían casado en septiembre de 2004. La mujer nunca había denunciado a su marido por malos tratos, aunque un hermano de la víctima que se trasladó al lugar de los hechos tras conocer la noticia, aseguró que la familia había aconsejado a la I.M.C. "muchas veces, que le dejara porque la maltrataba".
En el crimen de Aldeanueva de Barbarroya, según fuentes de la Delegación del Gobierno, los hechos ocurrieron en una calle del pueblo toledano donde la pareja, que tuvo dos hijos, había residido cuando aún convivía. María M.G.F., que desde la separación, hace años, residía en Madrid, iba en su vehículo por una calle del pueblo que se hallaba en fiestas, acompañada de la hija de ambos, cuando Floro D.V., que actualmente tenía su domicilio en un hostal de la vecina localidad de Alcaudete de la Jara, efectuó varios disparos de escopeta contra ella. Luego entró en el porche de una casa cercana, se sentó y se pegó un tiro.
La mujer fue trasladada herida muy grave en una UVI móvil al centro de salud de Belvís de la Jara, donde falleció a los pocos minutos del ingreso.
"Nos sentimos compungidos y desorientados porque nadie podía esperar ésto", dijo ayer el alcalde de Aldeanueva. "Se separaron hace muchísimos años y nunca supimos que hubiese violencia entre ellos".
Por otro lado, una mujer de 39 años resultó herida por quemaduras con ácido que le arrojó su ex pareja el viernes en Collado Villalba (Madrid). Tanto la mujer como el hombre, que bebió después del líquido abrasivo, se encuentran hospitalizados.
La Guardia Civil confirmó que sobre el agresor existía una orden de alejamiento desde el pasado diciembre, y criticó que la mujer le abriera la puerta. "Cuando una víctima obtiene de un juez una medida cautelar de este tipo para su agresor, lo que debe hacer en cuanto sepa que éste ha quebrantado esta medida es avisar al 112 o a las fuerzas y cuerpos de seguridad, que procederán a la detención inmediata por quebrantamiento de orden judicial", dijo ayer un portavoz del instituto armado al añadir: "Abrir la puerta puede ser una trampa mortal".
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