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Entrevista:NANI ROMA | Campeón de motos en 2004 y sexto en coches en 2005 | RALLY DAKAR | Los cinco muertos en la edición que concluye avivan la polémica sobre la prueba

"Es lo mismo que uno que paga por subir al Everest y tiene un accidente"

Robert Álvarez

Joan Nani Roma, que en 2004 se convirtió, a bordo de una moto KTM, en el primer y hasta ahora único español que ha logrado ganar el Rally Dakar, se ha pasado este año a la categoría de los coches y, formando parte del equipo Mitsubishi Repsol, ha concluido en una prometedora sexta posición. Desde Dakar, a través del teléfono, Roma expone sus puntos de vista respecto a esta polémica edición, la 27ª, que concluyó ayer en la capital senegalesa.

Pregunta. Comentó que el recorrido era esta vez "una mierda". ¿Por qué?

Respuesta. No es que fuera una mierda. Lo que pasa es que, cuando se me preguntó sobre ello, era un día realmente duro para todos. Fue el día que se había matado Fabrizio Meoni, el día en que lo ves todo negro, todo mal, en el que la carrera no vale para nada... Tú mismo te preguntas qué haces porque acabas de perder a un amigo. La etapa había sido muy dura y, si encima llegas cansadísimo y se te ha matado un amigo, piensas que todo es una mierda.

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P. ¿Hay alguna fórmula para prevenir el cúmulo de desgracias?

R. Ha sido un año de mala suerte. En toda la historia del Dakar ha habido gente que ha perdido la vida. Pero pasa como en muchos otros deportes, como la gente que va a la montaña, como la gente que va a esquiar o como en la carretera. Por desgracia, en tres meses hemos perdido a tres compañeros, a Richard

[Sainct], Fabrizio y José Manuel [Pérez]. Los accidentes no fueron siquiera por ir al máximo. Fueron momentos de mala suerte. ¿Prevenir? Esto es África. Es el desierto y es complicado, pero como otras muchas cosas en la vida que también son peligrosas.

P. ¿Cambia mucho sentarse al volante de un coche?

R. Evidentemente, te sientes mucho más seguro que sobre una moto. Tienes la protección de las barras antivuelco, estás encerrado en un habitáculo... Es distinto. Lo que pasa es que vas muy deprisa. Son 2.500 kilos con 500 litros de gasolina que también puedes... Si tiene que pasar algo, también te pasará. Te sientes más seguro, pero también tienes que vigilar.

P. ¿Cree que un piloto de motos en el Dakar tiene tantos riesgos como un alpinista?

R. Cada deporte tiene sus riesgos, aunque hay unos riesgos más controlados y otros menos. En el Mundial de motos o en la fórmula 1, si sucede un accidente, tienes a los médicos al instante. Eso no puede ser igual para un alpinista o un piloto en el desierto. Viendo las críticas a la carrera, pienso que lo que la gente tiene que respetar es lo que cada uno quiere hacer. En definitiva, la gente paga por correr y viene a cumplir su sueño, que es acabar el Dakar. Evidentemente, es peligroso. Pero es lo mismo que uno que va al Everest. Paga por subir y tiene un accidente. Esto es una carrera, un deporte. A nadie le obligan a venir aquí.

P. ¿Es un riesgo asumido?

R. Es un riesgo asumido. Cuando sale, la gente sabe que le pueden pasar cosas, que puede haber accidentes. Pero jugamos a esto. Venimos a hacer algo que nos apasiona y que, para algunos, también es nuestra profesión.

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Sobre la firma

Robert Álvarez
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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