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El autoservicio de Lula da Silva

Juan Arias

Por primera vez en el Itamaraty, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Brasilia, presidentes de la República, ministros y personalidades extranjeras y nacionales en vez de participar en los banquetes sentados, servidos por camareros, tienen que levantarse a coger su ración de comida. El ministro Celso Amorim ha introducido el autoservicio con la finalidad de que las comidas oficiales no duren tanto como antaño. Así, días atrás, se pudo ver a Georgi Parvanov, presidente de Bulgaria, levantarse con el plato en la mano para servirse personalmente. La única excepción permitida por el ministro Amorim es la de una mesa para el presidente Lula, servida por camareros. Pero, para que tampoco Lula pueda escapar al gesto más democrático del autoservicio, a la hora de los postres hasta los comensales de la mesa presidencial tienen que levantarse a buscar las golosinas.-

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