El Ibex recupera el 9.000
El petróleo y los beneficios empresariales animan la Bolsa
La Bolsa española ha recuperado esta semana el nivel de los 9.000 puntos en su índice Ibex 35, después de 42 meses, y cierra en máximos anuales. El descenso del precio del petróleo está dando la tranquilidad suficiente como para mantener posiciones de cara el inicio del próximo ejercicio.
El Ibex 35, el principal índice de la Bolsa española, ha terminado esta semana en 9.054,20 puntos, nuevo máximo anual, aunque lo más importante es que recupera ese nivel psicológico por encima de los 9.000 puntos después de 42 meses.
Las razones externas para esa recuperación de los mercados están, según muchos analistas, en el descenso del precio del petróleo, aunque otras opiniones apuntan hacia el alivio que ha provocado ese descenso de precios que es el que ha permitido a los inversores fijarse en los beneficios empresariales y en una coyuntura que, a medio plazo, no parece tan mala como pintan las previsiones.
Con ese panorama, que ya dura varias semanas, muchos inversores han optado por mantener sus posiciones más allá del cierre del ejercicio, lo que explica los bajos volúmenes negociados en un mercado en máximos. Cada vez son más los inversores convencidos de que muchas de las operaciones corporativas planteadas en las últimas semanas no son más que la punta de lanza del previsible desplazamiento de fondos desde el mercado inmobiliario hacia la renta variable. Ausencia de papel y búsqueda de oportunidades son, pues, los argumentos internos que justifican la llegada de muchas cotizaciones a los niveles máximos en casi cuatro años.
Con estos argumentos, los inversores han conseguido leer con más optimismo los indicadores y previsiones económicas que han ido llegando al mercado. En general, en Estados Unidos se estabiliza la actividad económica, con una revisión del PIB del tercer trimestre hasta el 4%, aunque en este último trimestre hay algunos indicadores que apuntan al mantenimiento de la irregularidad en la actividad económica, lo que garantiza la constante presencia de sobresaltos para los próximos meses.
En Europa, esta semana, destacó la revisión a la baja por parte de los institutos económicos alemanes de las expectativas de crecimiento en Alemania para el año próximo, pero los inversores están muy centrados en la orientación actual de las bolsas como para hacer caso de revisiones que afectan a un futuro que hoy parece muy lejano.
La contratación en la Bolsa española ha sido bastante baja en todas estas sesiones, aunque la actividad institucional, con importantes ajustes en sus carteras en esta parte final del ejercicio, ha suplido con creces las carencias de la inversión particular. Los propietarios de acciones han aguantado el atractivo de estos precios y apenas han hecho caso de los que recomiendan convertir una parte de las carteras en liquidez pura y dura.
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