España gana casi 500.000 habitantes en un año y roza los 43,2 millones

España ha ganado casi medio millón de habitantes en un año. Su población oficial asciende a 43.197.684 personas, según las cifras aprobadas ayer por el Consejo de Ministros. Estos datos, con fecha de 1 de enero de 2004, proceden de los padrones municipales y cuentan con el visto bueno del Consejo de Empadronamiento, el órgano adscrito al Instituto Nacional de Estadística (INE) que está encargado de revisar las cifras que ofrecen los ayuntamientos.

El aumento de población entre el 1 de enero de 2003 y la misma fecha de 2004 (480.620 personas más) es el más moderado desde 2000 (España contaba entonces con 40.499.791 habitantes). Desde entonces, la cifra de residentes se incrementó a un ritmo superior a las 600.000 personas por año. El récord se batió en enero de 2003, cuando los ciudadanos empadronados aumentaron en casi 900.000 respecto al año anterior y la cifra oficial de habitantes se situó en 42,7 millones.

Como en años anteriores, el alza de la población se debe sobre todo a la inmigración. Sin embargo, a lo largo de 2004, se ha observado una cierta desaceleración, según el INE (ver EL PAÍS del pasado 14 de octubre).

7% de extranjeros

Este organismo aún no ha difundido la cifra exacta de habitantes extranjeros que tenía España al comenzar este año, que ya alcanza los tres millones de personas. Este grupo supone en torno al 7% de la población española, pero su presencia varía mucho según las comunidades autónomas. El empadronamiento, que puede hacerse sin tener permiso de trabajo o residencia, confiere a los inmigrantes derechos como la asistencia sanitaria o la escolarización de los hijos. También sirve para probar el tiempo de residencia en España.

La otra fuente de crecimiento de la población, la diferencia entre nacimientos y muertes, tiene un peso muy inferior al de la inmigración. En 2003, por ejemplo, el número de bebés superó en 56.134 al de fallecidos. Si no se hubieran producido llegadas, la cifra de habitantes sólo habría ascendido en esa cuantía.

Aunque la población total de España ha aumentado un 1,12% en un año, la situación es desigual en las distintas zonas. Asturias ha sido la comunidad autónoma que ha perdido más habitantes en términos relativos: 1.620 menos, un 0,15% de bajada (ver gráfico). En Galicia el descenso ha sido de 109 personas. También ha bajado en las dos ciudades autónomas: 447 habitantes menos en Melilla y 277 en Ceuta.

La población ha crecido por debajo de la media nacional en comunidades como Extremadura (1.382 habitantes más, el 0,13% de aumento), País Vasco (3.075 personas, el 0,14% más), Castilla y León (gana 6.272, el 0,25) o Baleares (7.684 más, el 0,81%). Lo mismo ha ocurrido en la comunidad más poblada, Andalucía, cuya cifra de habitantes se incrementó un 1% (80.670 personas más).

También en términos relativos, los mayores aumentos de población se han registrado en La Rioja (6.163 nuevos empadronados, un 2,14% más) y Murcia (25.464 vecinos, un alza del 2%). Por encima de la media se encuentran Castilla-La Mancha (su población crece en 33.100 personas, un 1,82%), Madrid (85.887 nuevos empadronados, el 1,5% más), Cataluña (109.173 habitantes más) o la comunidad Valenciana (72.419). En ambas la población aumenta el 1,62%. En Aragón la población se incrementó en 19.494 habitantes (un 1,58%).