Qurei critica la conferencia convocada por Blair

El primer ministro palestino, Ahmed Qurei, fue ayer mucho más combativo que el líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Abu Mazen, y arremetió con extrema dureza contra la reunión de Londres que prepara el primer ministro británico, Tony Blair, para el mes de marzo. Qurei afirmó que lo que se necesita en este momento es una verdadera conferencia de paz, como la celebrada en Madrid en 1991, y que incluya a las dos partes, palestinos e israelíes, y no una reunión descafeinada con los donantes con el objetivo de profundizar en la reforma de las instituciones palestinas.

En lo que parece un reparto teatral de los papeles ante la comunidad internacional, el primer ministro palestino aseguró que aún no estaba en condiciones de garantizar la presencia de un miembro de su Gobierno en dicha conferencia londinense. Su homólogo israelí anunció el día anterior que su Gabinete no enviará al titular de Exteriores para evitar que se pueda percibir la reunión como un arranque del proceso de paz, muerto desde hace cuatro años. Abu Mazen había dado el martes su bienvenida a la iniciativa del primer ministro británico, aunque también insistió en que la paz sólo se podrá alcanzar con el final de la ocupación israelí y la vuelta a las fronteras de 1967, a la llamada línea verde del armisticio.

Qurei rechazó la sugerencia de Blair de que antes de negociar la paz con Israel, la Autoridad Nacional Palestina necesite democratizarse y acabar con una corrupción que salpica a varios de sus más altos cargos, incluidos Qurei y Mazen, además del difunto Yasir Arafat y su familia. "Esas declaraciones [las de Blair] son inaceptables", dijo Qurei tras depositar su voto en las elecciones municipales. "Son los israelíes los que requieren esa rehabilitación para la paz, no nosotros. Lo que necesitamos es una auténtica conferencia de paz, no una cita".