Jubilación forzosa
Todo el mundo dice que "las personas" son lo primero, y que los activos humanos son más importantes que los financieros o los tecnológicos; pero la realidad es otra, para la muestra, la aplicación "sin demora" de la jubilación forzosa en profesionales que han entregado toda una vida a esta institución, quienes muchos de ellos, esperanzados en jubilarse a los 70 años como indicaba la legislación anterior, les indicaron conseguir un certificado de idoneidad física y mental para el desempeño de su profesión meses atrás, para nada, porque, la aplicación "sin demora" del Estatuto Marco, los deja asumiendo una nueva realidad psicosocial y económica; se dicta una Resolución el 16 de noviembre de 2004 declarando la jubilación forzosa del personal estatutario; se publica en el BOJA el 23 de noviembre de 2004.
Siendo evidente todo lo escrito sobre cómo afecta la jubilación a las personas que deben de asumirla, era más que prudente el uso racional de la jubilación forzosa, es el trabajo uno de los aspectos más importantes en la vida de las personas, es donde se pasa gran parte del día y donde se desarrolla una parte fundamental de la vida de relación, uno no se jubila porque es viejo, sino que se hace viejo porque lo jubilan, siendo el SAS una empresa prestadora de servicios en salud, debería de dar ejemplo en prevenir los trastornos que puede conllevar una jubilación forzosa y con "prisa", habíamos oído hablar de jubilaciones anticipadas, de jubilaciones incentivadas, pero ahora se crea una figura en función de la edad,no aplicable a otros ámbitos (ejemplo, políticos de 81 años haciendo campaña electoral).
Se indica una resolución retirando del mercado laboral a una serie de profesionales sin darles tiempo alguno, ni siquiera un tiempo prudente de aceptación, ni siquiera se les agradece en la resolución la prestación de sus servicios y la aportación durante todos estos años a esta organización, porque estamos seguros que más de uno ha aportado; qué tristeza de fin de la vida laboral.
