Las devoluciones a los clientes de Eurobank alcanzan el 88% de la deuda

La última crisis del sistema bancario español está cerca de concluir, aunque sigue levantando polvareda. Eurobank devolverá esta semana a sus sufridos ahorradores 6,7 millones de euros más. Sumados a los 101,32 millones abonados en julio y los 10,8 millones de noviembre, las devoluciones alcanzan ya el 88% de la deuda total: 135,09 millones de euros que quedaron atrapados cuando el banco cerró sus puertas, en agosto de 2003.

"Se trata de la única suspensión de pagos de una entidad financiera española en la que en menos de dos años todos los depositantes habrán recuperado íntegramente sus recursos, y con unos intereses del 2,5%", manifestó a este periódico Eduardo Pascual, ex presidente y máximo accionista de Eurobank. Pascual, inhabilitado por el Gobierno a petición del Banco de España, ha sido el centro de las iras de los clientes de Eurobank durante toda la crisis, junto a la propia autoridad monetaria.

Tras ser intervenido por el Banco de España, Eurobank presentó suspensión de pagos y posteriormente inició un proceso de liquidación y devolución de los depósitos a sus más de 2.000 clientes. "La mayor parte de la deuda pendiente de abonar corresponde al Fondo de Garantía de Depósitos", que acudió al rescate de los ahorradores en la primera fase de la crisis, explica un portavoz de Eurobank. La entidad bancaria tiene previsto abonar la totalidad de la deuda en los primeros meses del próximo año.

Pero los afectados, agrupados en la asociación Adaem, aseguran que la mayoría tiene aún una parte de sus ahorros en el banco. De nuevo luces y sombras en una crisis que puso en entredicho la actuación del Banco de España -realizó 10 inspecciones durante ocho años y no pudo evitar la liquidación de la entidad- y en la que el Fondo intervino de una forma singular, "por cesación de pagos de facto". Es decir, debido a que el banco echó la persiana.

Para pagar el 100% de los depósitos más los intereses, el banco cuenta todavía con parte de su cartera de créditos y con activos inmobiliarios. Los juzgados han rechazado ya varias ofertas por esos activos, aunque la comisión liquidadora espera nuevas propuestas, que deberían estar "por encima de los 50 millones de euros", según fuentes de Adaem. Esta asociación cuenta con uno de los tres representantes en la comisión liquidadora de Eurobank. Si no llega una buena oferta, los activos serán subastados.

Los afectados persiguen una solución política a la crisis para evitar que la devolución de los depósitos se alargue hasta mediados del próximo año. "El objetivo es que pague el Fondo de Garantía de Depósitos y que después recupere ese importe con los activos crediticios e inmobiliarios", explicó el presidente de Adaem, José Cordón. "La subasta no es la mejor solución, porque los activos se acabarían vendiendo por debajo del precio de mercado", aseguró un portavoz del banco.

Los depositantes tienen prácticamente asegurado el cobro íntegro de sus ahorros más unos intereses del 2,5%, pero los accionistas lo tienen mucho más crudo. El capital social del banco asciende a 26 millones de euros, controlado en su mayoría por un grupo de empresas de Pascual. Sin embargo, entre los accionistas hay también muchos pequeños ahorradores que antes de la crisis canjearon depósitos de alta rentabilidad por acciones y obligaciones del banco. "A esa gente nadie les va a devolver un solo euro", afirmó Cordón. "Lo prioritario son los depositantes", de acuerdo con fuentes del banco.

Frente judicial

Dieciséis meses después de echar el cerrojazo, la crisis está cerca de su desenlace final. Pero el frente judicial sigue abierto. Pascual tiene en los juzgados una demanda penal por un presunto delito societario y de estafa a un ex socio suyo en la empresa BCG Comercio Exterior. El fiscal pide seis años de cárcel para el ex banquero, y el juez hace responsable civil subsidiario a la entidad financiera. En los juzgados de lo civil hay al menos otra demanda contra Pascual, interpuesta por la sociedad Catapesca.

A esas causas se añaden las denuncias interpuestas por los clientes del banco. Y una amenaza latente: Adaem asegura que emprenderá acciones legales contra Pascual si finalmente no se ejecuta el 100% de la deuda más los intereses pactados. "Hay varias demandas penales individuales que pueden llegar a ser conjuntas", advirtió Cordón.