El primer informe del Defensor del Menor alerta sobre la actividad de guarderías "clandestinas"

La cifra de jóvenes y adolescentes que han abortado en Andalucía en 2003 ha aumentado un 10,39% respecto al año anterior, según recoge el primer informe anual elaborado por el Defensor del Menor, José Chamizo. Más de 2.400 chicas de 15 a 19 años y 69 menores de 10 a 14 años se sometieron a una interrupción voluntaria de su embarazo, según datos de la Consejería de Salud. Entre las quejas recibidas por la institución el año anterior abundaron las relacionadas con la educación, en especial las denuncias de "guarderías clandestinas" y conflictividad escolar.

La presidenta del Parlamento andaluz, Mar Moreno, recibió ayer el primer informe específico que elabora el Defensor del Menor de Andalucía, correspondiente al ejercicio 2003. Esta figura institucional, que José Chamizo compatibiliza con su función de Defensor del Pueblo andaluz, se está reforzando en los últimos tiempos con la creación de una página propia en Internet (www.defensordelmenor-and.es) y la puesta en marcha de un teléfono gratuito (900 506 113) para recibir directamente las denuncias. El informe, que tendrá una periodicidad anual, pretende convertirse en un instrumento "eficaz" para transmitir las actuaciones de la oficina.

El primer documento recoge que, entre las 518 quejas tramitadas durante el año anterior, proliferan las relacionadas con la educación, en especial las reclamaciones sobre "guarderías clandestinas o sin los correspondientes permisos o autorizaciones administrativas" o los procesos de escolarización de alumnos en centros docentes financiados con fondos públicos.

"La situación actual en Andalucía de los centros que atienden a los niños de entre 0 y 3 años dista mucho de ser la adecuada", concluye el estudio, que señala que escasean los centros privados adaptados a los requisitos de la LOGSE. "Una parte muy sustancial de la demanda de plazas es atendida por los centros privados no adaptados, tanto los autorizados provisionalmente como los que no disponen de dicha autorización", señala el texto.

Aunque sin aportar datos sobre la situación en Andalucía, el documento también se hace eco del incremento de la conflictividad en los colegios, "ya se trate de episodios graves de violencia escolar" o de casos de menor relevancia que "provocan graves alteraciones en la convivencia cotidiana de los centros por su multiplicación y reiteración".

La institución puntualiza que no pretende crear "una alarma injustificada" pero tampoco "minimizar la importancia de un problema que es muy real". En el informe piden a las autoridades educativas que adopten medidas concretas para atajar "este problema emergente". Entre las que sugiere la Oficina, figura la incorporación de profesionales formados específicamente en las relaciones humanas y la resolución de conflictos. Chamizo, además, reclamó alternativas para los menores que no quieran seguir estudiando hasta los 16 años.

Los datos estadísticos recogidos por el Defensor del Menor de Andalucía a partir de información suministrada por otras fuentes reflejan, asimismo, que la cifra de abortos entre las adolescentes y jóvenes creció un 10,39% durante el año anterior en relación con 2002. Si bien la mayoría de los casos se dieron en muchachas de 15 a 19 años, resultan especialmente llamativos 69 casos registrados ente menores de 10 a 14 años.

José Chamizo precisó que los menores "son una responsabilidad social" que no sólo compete a los padres y reclamó a la Administración que incida en la prevención familiar para evitar casos de desamparo.