El Ejecutivo propone subir la cuota de abono del teléfono un 2% y bajar un 1% las llamadas

Los ministerios de Industria, Turismo y Comercio y de Economía han propuesto una subida de la cuota de abono de Telefónica para el año 2005 del 2%, lo que supondría 0,25 euros y situar esta cuota en 13,42 euros, así como bajar el precio global de las llamadas telefónicas un 1%. La propuesta está en trámite de audiencia con los sectores implicados que son Telefónica, Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones, Consejo de Consumidores y Usuarios y las patronales AETIC y ASTEL. El modelo de fijación de precios (price cap) se mantendrá por el momento.

Con la propuesta adelantada por Industria y por Economía, que tendrá que ser aprobada por la Comisión Delegada para Asuntos Económicos, se prolonga al menos por seis meses el sistema de control de precios de Telefónica (price cap) para dar tiempo a la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones a concluir sus estudios sobre los mercados de referencia y hacerse cargo del control de los mercados.

En la práctica, según fuentes de la Administración, la propuesta supone una congelación de los precios el próximo año. El anterior Gobierno del PP había anunciado que la liberalización de las tarifas telefónicas se produciría a partir del 1 de enero próximo.

Modificaciones

El mantenimiento de la llamada cesta de precios supone que las modificaciones se realizarían antes del 1 de julio en lugar del 1 de noviembre como sucedía hasta ahora. De esta forma, "la bajada de precios estará en vigencia cuatro meses más", explicaron fuentes de Industria.

En el comunicado hecho público ayer se explica que la subida de la cuota de abono es igual al aumento de precios (IPC) previsto (2%) y recuerda que en este año la cuota subió un 4,35%, mientras que el incremento de las tarifas globales del tráfico telefónico ha sido del 2%. La propuesta señala que no subirá la cuota de conexión, ni las líneas alquiladas y para el servicio de cabinas no se incrementaría el recargo ni el precio del servicio.

La última decisión de Telefónica en cuestión de precios fue centrar toda la rebaja de tarifas a la que le obligaba el regulador (desde el 1 de noviembre) en las llamadas de fijo a móvil, unas de las más caras, por encima incluso de las conferencias internacionales.

Así, la filial de telefonía fija de Telefónica trasladaba a sus clientes la reducción de precios de interconexión (lo que cobran las operadoras de móviles por dejar que las llamadas desde un fijo acaben en su red) que había obtenido en octubre.

La Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT), organismo que regula y supervisa este mercado, aprobó una rebaja entre el 10,5% y el 15,5% de los precios de terminación a móviles. En concreto, la rebaja acordada fue del 10,5% para Vodafone; el 12% para Telefónica Móviles, y del 15,5% para Amena. Después de esa nueva reducción, los precios medios de terminación son de 12,8 céntimos por minuto para Telefónica Móviles; 13,1 céntimos para Vodafone y de 15,2 céntimos para Amena.

Precios máximos

De acuerdo con el sistema de precios máximos vigente, Telefónica debía bajar el conjunto de sus tarifas el 2% en dos revisiones tarifarias, una el 1 de abril y otra el 1 de noviembre. En la primera, Telefónica subió la cuota de abono que cobra todos los meses a sus clientes el 4,35% (0,55 euros), hasta 13,1684 euros. Para compensar, la operadora llevó a cabo un descenso medio del 2,15% en las llamadas internacionales, con especial atención a los países que aportan mayor inmigración, como Ecuador.

Ambas medidas combinadas arrojaron una reducción global del 0,19%, por lo que la bajada de las tarifas de fijo a móvil de noviembre debería tener un efecto sobre el conjunto del 1,81%.