El falso techo del hospital de Fuenlabrada se cae otra vez

La caída el pasado domingo de una plancha de falso techo en el hospital de Fuenlabrada, la cuarta desde que el centro abrió sus puertas a principios de este año, obligó ayer al consejero de Sanidad, Manuel Lamela, a dar la orden de retirar todos los falsos techos con rejilla del hospital. Éste es uno de los cinco tipos de techo que tiene el centro. Una enfermera resultó gravemente herida la semana pasada en otro desplome.

El último incidente con los techos del hospital se produjo el pasado domingo en la zona de urgencias, sin que nadie resultara herido. Una enfermera, M. J., resultó herida grave la pasada semana, con una fisura en el cráneo y un hematoma intracraneal, tras recibir el impacto en la cabeza de una plancha de casi medio metro cuadrado de superficie y 15 kilos de peso.

En marzo, dos meses después de la apertura del hospital de Fuenlabrada, el centro ya tuvo que reponer todo el vestíbulo y otras dependencias de la planta baja, 1.300 metros cuadrados de techo en total, tras los dos primeros desplomes. Las obras duraron dos meses y fueron costeadas por la empresa constructora.

Lamela estuvo ayer acompañado del alcalde de Fuenlabrada, Manuel Robles, en la visita que hizo al hospital. Lamela señaló que la orden de retirada la ha dado tras la conclusión de la revisión integral del edificio que han realizado los arquitectos del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS)

El centro hospitalario dispone de cinco tipos diferentes de falsos techos, cuatro de ellos desmontables y uno de ellos no desmontable. Entre los desmontables, hay uno de fibra, otro de madera, otro de vinilo y otro de rejillas de chapa perforada, que es el que ha causado los desplomes y el que va a ser retirado. El no desmontable es de pladur continuo y ocupa la mayor parte de la superficie del hospital.

Lamela también pidió disculpas a los usuarios por el aspecto estético que tendrá el centro hospitalario como consecuencia de la retirada de los falsos techos.

A diferencia de lo ocurrido en marzo, en esta ocasión Sanidad y el hospital sí han informado al Ayuntamiento de los nuevos desplomes ocurridos. Hace ocho meses, Robles reaccionó airadamente tras conocer los dos primeros por los medios de comunicación sólo tres días después de haberse reunido con Lamela. Entonces, el alcalde acusó al consejero de ocultar información y de seguir una "política de opacidad".

Malestar

La situación, sin embargo, está causando un notable malestar entre los trabajadores y los sindicatos del hospital de Fuenlabrada, que consideran que ni la dirección del hospital ni la Consejería de Sanidad han tomado las medidas de precaución a tiempo para evitar los riesgos que sufren los pacientes y empleados a causa de las caídas de planchas de falso techo.

Cada plancha de rejilla lleva un anclaje a la estructura del edificio y estos anclajes son los que están fallando. Su elevado peso, hasta 15 kilogramos por pieza, y la elevada altura de la cobertura en algunas dependencias del hospital, hasta ocho metros en el vestíbulo, convierten cada desplome en un grave riesgo para las personas que transitan por las zonas de paso y las habitaciones del centro hospitalario.

José María Porras, secretario general del sindicato de Enfermería Satse, ya expresó el pasado jueves su malestar con la actuación de Sanidad y la gerencia del centro: "No se explica por qué la dirección del centro no ha tomado medidas antes", afirmó. "Además, desde días antes de estos nuevos desplomes los responsables de la unidad donde resultó herida la trabajadora habían informado a la dirección de las deficiencias observadas en los techos", expresó Porras el pasado jueves.

Por otro lado, Sanidad ha solicitado a los servicios jurídicos un informe para estudiar las actuaciones que se puedan emprender contra la empresa constructora por tres motivos. El primero sería la indemnización de la enfermera herida. Los otros dos, por los daños y vicios ocultos existentes en el edificio y por los daños en la imagen de los servicios sanitarios de la Comunidad de Madrid, según lo manifestado ayer por fuentes de Sanidad.