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Inscanner cobró de Sanidad en 2003 casi el doble de lo previsto por diagnósticos con resonancias

La empresa fundada por un concejal del PP de Alicante facturó unos tres millones más

Inscanner, la empresa cofundada por el concejal del PP del Ayuntamiento de Alicante, Luis Concepción, facturó el año pasado a Sanidad 6,053 millones de euros por diagnósticos de resonancia magnética nuclear, frente a los 3,19 previstos en el contrato de gestión de los servicios, lo que supone una desviación del 89,3%. Los sobrescostes se extienden a las otras dos concesionarias: Eresa (58,3%) y Beanaca (56,7%). El gasto total desde 2001 ha sido de 76,6 millones, 26 más de lo estimado. Sanidad decidió en 2000 ceder este diagnóstico al sector privado mediante concurso.

La brecha entre el gasto inicialmente previsto para el diagnóstico por resonancia magnética nuclear por la Consejería de Sanidad y el realmente gastado es cada año más grande. Las tres adjudicatarias del concurso por el que la consejería decidió ceder este servicio a empresas privadas facturan cada año una cifra que se aleja más que el anterior respecto a las estimaciones iniciales de gasto. En 2001 la desviación fue del 39,5%, en 2003 del 48,74% y en 2003 un 65,7% más de lo inicialmente previsto en el concurso. El sobrecoste no fue similar en las tres firmas. La oferta presentada por Beanaca (concesionaria en parte de la provincia de Alicante) era para el año 2003 de 1,19 millones, aunque el año pasado facturó exploraciones por valor de 1,87 (un 56% más). En el caso de Eresa, a quien correspondió las pruebas de los pacientes de la Seguridad Social de las provincias de Valencia y Castellón, la cifra fijada era de 14,02 millones aunque se facturaron 22,2, un 58% más. La desviación más elevada fue la de la firma Inscanner, a quién correspondió la mayor parte de Alicante, que en lugar de los 3,1 millones del acuerdo, facturó 6,05, es decir un 89,3% más, según respuestas parlamentarias de Sanidad al grupo socialista.

"Sentido de la ética"

Esta empresa fue cofundada por el actual concejal de tráfico y transportes del Ayuntamiento de Alicante, Luis Concepción, quien estuvo de actualidad antes de verano porque sus hijos acudieron a los tribunales para reclamar la titularidad de una tercera parte de la sociedad. En 1999, el entonces presidente de la Comisión de Sanidad de las Cortes Valencianas y diputado por el PP mostró un documento notarial en las dependencias del hemiciclo valenciano en respuesta a una información publicada por este diario relativa a la presencia de sus hijos como accionistas de Inscanner. El documento reflejaba una cesión onerosa de las acciones de sus hijos -que tenían un tercio de la empresa- en favor de Enrique López, cofundador de la firma junto a Concepción y un tercer socio. La fecha era del 6 de junio de 1995, cuando Concepción estaba a punto de acceder al acta de diputado. Su "sentido de la ética" fue el que le llevó a separarse "completamente de la sociedad" Y señaló: "Antes de tomar posesión como diputado vendí las acciones de mis hijos". Sin embargo, para la juez, este escrito en el que se amparó Concepción para defender su alejamiento de la empresa no tiene valor. "Nunca se llegaron a transmitir realmente las acciones pues los actores

[Luis, Carolina, Beatriz y Jorge Concepción Aramendia; los cuatro hijos del ex diputado] en 1995 no eran los dueños materiales sino su padre", apuntó en la sentencia que declaró a los hijos de Concepción titulares de un tercio de las acciones de la firma. Pero además de dejar claro que Luis Concepción seguía llevando las riendas de sus acciones, la juez añadió que la cesión de las participaciones hacia Enrique López supuso que "hacían el favor al señor Concepción de poner las acciones de éste a su nombre". La sentencia recordaba que desde un principio "se plantearon problemas de incompatibilidad por parte de los socios fundadores, los señores López, Concepción y Verdú" a causa de su condición de médicos y a la vez contratistas de la sanidad pública "lo que fue produciendo maniobras de puesta de acciones a nombre de miembros de sus familias". Por ello "son los hijos socios formales y los padres los verdaderos socios". Y destaca que pese a la cesión de acciones, "las decisiones de trascendencia se siguen tomando por los socios fundadores", entre los que figura el concejal.

"Uso ineficiente"

En el último congreso de la Sociedad Española de Radiología Médica se mostró un trabajo que comparaba la tasa de uso de diagnósticos con resonancia en diversos lugares. Las cifras recomendadas por la propia sociedad (20 por mil habitantes y año), consultoras como Antares (26) o las del hospital Virgen del Rocío de Sevilla (20) chocaba con la elevada tasa valenciana (71).

"Existe una clara descompensación hacia una de las técnicas de diagnóstico por imagen", apunta la diputada socialista María José Mendoza para explicar esta situación. "Este diagnóstico hay que usarlo en función de las necesidades de salud de la población y cuando nos separamos tanto de la media quiere decir que se hace un uso ineficiente que no sólo repercute sobre el gasto sanitario, sino también sobre la reposición de tecnología en hospitales o la introducción de nuevos servicios". Mendoza puso el ejemplo del hospital de Orihuela, donde la lista de espera para hacerse un TAC es de 9 meses debido a la falta de equipos, mientras en el caso de las resonancias la espera es prácticamente inexistente. La diputada socialista considera que la falta de control de Sanidad sobre las empresas -cuantos más diagnósticos practican, más beneficios obtienen- condiciona este modelo.

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