Un jardín oculto centra el proyecto ganador del Centro de Documentación de la Arquitectura

El estudio sevillano José Morales-MGM Arquitectos presentó ayer en Sevilla el proyecto que transformará el antiguo convento de Nuestra Señora de los Reyes, un conjunto en pleno centro histórico de la capital andaluza construido entre los siglos XVII y XIX, en el nuevo Centro de Documentación y Difusión de Arquitectura e Ingeniería Civil de Andalucía. El proyecto, que según las previsiones estaría terminado en 2007, conjuga la rehabilitación de la iglesia, los coros y el claustro, la recuperación de la huerta del convento y un entramado de edificios de nueva planta con una arquitectura "muy orgánica", según definió ayer el director del estudio José Morales.

Jardín oculto es el título del proyecto con el que José Morales-MGM Arquitectos ganó, el pasado 21 de octubre, el concurso convocado por la Consejería de Obras Públicas y Transportes al que se había presentado 47 estudios. El equipo que dirige Morales desde 1998 obtuvo el Premio Nacional de Arquitectura de Vivienda Social 2001 por su edificio de San Jerónimo (Sevilla). El galardón lo concede el Consejo Superior de Arquitectos de España.

El jurado, del que han formado parte el sevillano Guillermo Vázquez Consuegra, como arquitecto designado por los concursantes, y el italiano Francesco Venezia, designado por el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Arquitectos, ha valorado "la inclusión de los elementos preexistentes, tanto de los edificios como de los espacios abiertos".

"Hemos querido hablar de Sevilla oculta, de espacios interiores como los grandes huertos o jardines que tenían los conventos encerrados en el corazón de una manzana. Por eso, nuestro proyecto destaca ese vacío que existía en el centro del solar que se convertirán en unos 1.500 metros cuadrados de jardín", explicó ayer José Morales, sevillano de 45 años y catedrático de Proyectos en la Escuela Superior de Arquitectura de la Universidad de Sevilla.

"El conjunto es una especie de edificio-paseo. Es un organismo que, al tiempo que concecta los nuevos espacios propuestos, ofrece una sugerente imagen del conjunto como unidad. En esta línea la unidad de la fachada se considera estratégica", ha escrito el jurado del concurso sobre el proyecto ganador.

"Uno de nuestros objetivos es que el centro dinamize el barrio. El jardín se verá desde el bar y la librería, que estarán abiertos al público por la calle Muro de los Navarros", comenta Morales, quien trabaja en el estudio junto a los arquitectos Sara de Giles, Juan González Mariscal y Carlos Morales.

El antiguo convento de Nuestra Señora de los Reyes, al que se accede a través del compás en la calle Santiago, linda también con las calles Muro de los Navarros, Azafrán y Ave María, en pleno centro histórico de Sevilla. La Iglesia vendió el convento en la década de los 70 ante el deterioro del edificio y la imposibilidad económica de afrontar una rehabilitación. La Junta de Andalucía lo adquirió en 1986 y lo adscribió a la Consejería de Obras Públicas. En 1992 se realizó una rehabilitación parcial del conjunto que alcanzó a la iglesia, el coro bajo, el compás y algunas dependencias anexas. Desde entonces, el antiguo convento se utiliza como sala de exposiciones, jornadas y conferencias de la Consejería de Obras Públicas.

Según el concurso de ideas, el futuro Centro de Documentación y Difusión de Arquitectura e Ingeniería Civil de Andalucía y Ordenación de su Entorno Urbano contará con cuatro espacios diferenciados. "Por un lado, estarán los espacios expositivos y el salón de actos; habrá una sala para los investigadores y documentalistas; oficinas de administración para la sección de Fomento y Difusión de la Arquitectura y, por último, la parte abierta la público en general que estará formada por el bar y la librería", explica Morales, cuyo estudio está construyendo el Palacio de Congresos de Zamora y es autor de dos proyectos cuyas obras que comenzarán en breve: la biblioteca central de Jerez y un nuevo aulario para 2.000 alumnos en la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla.

"Hay árboles en la huerta que conservaremos, como antiguos ombuses y palmeras; pero también hay pequeñas edificaciones de autoconstrucción que se demolerán. Las lamas de madera iroco recorrerán, como si se tratara de una abanico, las salas de exposiciones que mirarán al jardín, de forma que su sensualidad estará siempre presente en el interior del edificio", concluye Morales.