El Ayuntamiento prevé expropiar Tablada por 7 millones, frente a los 210 que exigen las empresas

El Ayuntamiento de Sevilla ha calculado en 7 millones de euros el justiprecio por el que pretende expropiar las casi 360 hectáreas de Tablada para facilitar la creación de un parque periurbano. Un valor que, si es admitido por el jurado de expropiación, dejará en evidencia lo arriesgado de la operación que convirtió a una decena de inmobiliarias en propietarias de los terrenos. Las empresas, que constituyeron el grupo Tablada Hispalis, compraron en 2001 esos suelos por 82 millones a las cajas sevillanas cuando ya se había anunciado la expropiación de los terrenos, rústicos e inundables. Los propietarios reclaman una indemnización mínima de 210 millones de euros, 30 veces más que lo que está dispuesto a pagar el Ayuntamiento.

Las inmobiliarias propietarias de Tablada pretenden llevar a cabo, contra viento y marea, un proyecto muy similar al que diseñaron a finales de los noventa El Monte y Caja San Fernando: transformar parte de las 360 hectáreas rústicas e inundables que compraron en 1997 las cajas al Ministerio de Defensa en una pequeña ciudad de 15.000 viviendas en la periferia virgen de la capital sevillana. Una operación avalada por el Ayuntamiento de Sevilla de entonces (gobernado por el PP y el PA), que le valió a las cajas la censura del Banco de España por su carácter "especulativo" y el rechazo frontal de la Junta.

Ante la polémica suscitada, el Ayuntamiento de Sevilla anunció a principios de 2001 que iba a expropiar los terrenos para crear un gran parque. A pesar de eso, las cajas consiguieron colocar los terrenos seis meses después a un grupo de inmobiliarias por 82 millones de euros, con una ganancia de más de 24 millones. Hubo más compraventas de terrenos entre inmobiliarias, y en 2003, las empresas no sólo intentaron, sin éxito, introducir su proyecto inmobiliario en el plan urbanístico de la ciudad. Además, calcularon que el Ayuntamiento tendría que indemnizarlas con 210 millones, en función de las últimas operaciones de compraventa, que habían inflado aún más el precio (60 euros por metro cuadrado) de unos terrenos en los que las Administraciones iban a impedir usos residenciales.

La última palabra sobre el valor de la expropiación la tendrán los tribunales, pero el precio que quiere pagar el Ayuntamiento dejaría en muy mal lugar la operación. El concejal de Urbanismo, Emilio Carrillo, explicó ayer que el último paso dado esta semana por la Consejería de Medio Ambiente -un convenio con la Universidad para estudiar los usos del futuro parque periurbano- ha permitido a los servicios jurídicos dar vía libre al "escenario" más favorable a los intereses municipales. "La declaración de parque periurbano anula cualquier posibilidad de uso distinto en el futuro, pero eso depende de la Junta y el tribunal tiene que apreciar que se va a hacer", indicó Carrillo para justificar la importancia que le da el Ayuntamiento al convenio.

El escenario más favorable supone pagar el metro cuadrado a menos de 2 euros de media, lejísimos de los 60 euros reclamados por las empresas. Ni las empresas ni ninguno de los dos grupos de la oposición municipal de Sevilla, PP y PA, se pronunciaron ayer sobre la cifra que ha propuesto la Gerencia de Urbanismo como justiprecio para expropiar Tablada. En el caso del PP, la negativa se explica en que los populares siguen mostrándose en contra de la adquisición de la dehesa por parte del Ayuntamiento para establecer un parque.

Por su parte, el edil andalucista y anterior delegado de Urbanismo, Rafael Carmona -en abril de 2001, como concejal de Urbanismo, anunció la intención de expropiar la dehesa-, también prefirió no valorar el justiprecio porque, a su juicio, el PSOE está utilizando Tablada como una "cortina de humo" para tapar otras "operaciones especulativas" en zonas verdes, como el Jardín Americano y los Jardines del Guadalquivir, en la Isla de la Cartuja, donde el PGOU prevé usos terciarios.