Sin accesibilidad
No sé que es lo que está pasando últimamente en Madrid, porque, a pesar de que existen normativas y legislación en materia de accesibilidad, resulta que parece ser que hay quien con frecuencia o no las cumple o no se lo exigen, o no está obligado a cumplirla. Lo cierto es que estoy viendo muy frecuentemente edificios de nueva construcción en donde los locales comerciales se están abriendo con un escalón para entrar. Sirva pasearse por cualquier PAU nuevo de Madrid y verán que hay quien sigue abriendo un nuevo establecimiento en el que no es posible el acceso de una persona con silla de ruedas.
Pero la cosa no sólo queda ahí, sino que aparecen de vez en cuando edificios nuevos con escalón en el portal. A nadie parece importarle. Hace poco tuve la ocasión de viajar a una ciudad española donde no se concede una licencia de nueva actividad a un local que no reúna la accesibilidad para todos, es decir, que esté carente de barreras arquitectónicas.
Aquí en Madrid se pretende llegar al 2012, y que se nos conceda la capitalidad olímpica. Para ello continuamos haciendo una ciudad inaccesible, llena de barreras hasta en los nuevos proyectos urbanísticos. Sirva decir que hace algo más de un año reclamé que se hicieran los rebajes de bordillo a un nuevo paso de peatones junto a una parada donde subo al autobús, el cual se ha hecho hace unos tres meses, un año después de repetidas reclamaciones por mi parte y finalmente un escrito pidiendo por favor que alguien atendiera mi solicitud para poder cruzar la calle como las personas.
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