Simancas reclama un pleno monográfico que acuerde una paga extra a 34.000 ancianos
El portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid, Rafael Simancas, pidió ayer la celebración de un pleno monográfico en el Parlamento regional sobre la situación de las personas mayores para proponer que los 34.000 ancianos madrileños que actualmente reciben una pensión no contributiva (263 euros al mes) cuenten cada año con una paga extra que complemente sus ingresos.
Simancas, que realizó esta propuesta tras reunirse con una representación de la Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT-Madrid, señaló que la Comunidad debería realizar "un esfuerzo para mejorar las prestaciones económicas de las personas mayores" similar al que ya están haciendo Andalucía, Cataluña, Navarra o Baleares.
La "paga extraordinaria número quince", como la denominó el portavoz socialista, tendría un coste de nueve millones de euros, si bien Simancas prefirió "no poner ningún límite al complemento de las pensiones" para "no cerrar el debate y la posibilidad de acuerdo" con los otros dos grupos del Parlamento autonómico (PP e IU).
El líder de la oposición autonómica se mostró partidario de acometer en el conjunto del Estado "un gran objetivo de carácter social" para que, "a medio plazo", todas las pensiones se equiparen con el salario mínimo interprofesional, que actualmente ronda los 490 euros.
Simancas también resaltó la necesidad de incrementar los recursos autonómicos para cubrir la demanda de 20.000 plazas residenciales, equiparar a los niveles europeos los servicios de teleasistencia, asistencia domiciliaria y plazas en centros de día, universalizar los servicios de geriatría en todas las áreas sanitarias y hospitales de la región y poner en marcha un "plan de mejora social de las personas mayores" que contemplara una "ley regional de atención a las dependencias".
Los socialistas también propondrían en la Asamblea aprobar "un plan de asistencia jurídica y garantía de derechos de los mayores" que atajara "la discriminación, el abuso, el fraude y el maltrato" que sufren algunos ancianos, a los que, según dijo Simancas, "se les ofrece una plaza residencial a cambio de su pensión mínima y de su vivienda".
Según el portavoz del PSOE, que citó datos del Imserso, el 7% de los 867.000 madrileños que tienen más de 65 años, es decir, unos 60.000, cuentan con ingresos que les sitúan en "el umbral de la pobreza", mientras que otros 150.000 "padecen de pobreza real" y alrededor de 520.000 (el 60%) tienen percepciones inferiores al salario mínimo interprofesional.
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