La carta de Vera II
Entender algunos comportamientos y actitudes requiere un esfuerzo individual para informarse, comprender y valorar actuaciones en un momento determinado. Lo puntualizo porque jamás debe perderse de vista la historia y el tiempo para intentar entender algo. Sin ese esfuerzo es imposible entender la carta del señor Rafael Vera ni, evidentemente, muchas otras cosas. Con estas líneas quisiera hacerle llegar mi respeto por su actitud honesta y valiente de afrontar esta encrucijada política, legal e ideológica. Repito, señor Vera, le envío mi más profundo respeto.
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