¿Juegos Olímpicos aquí?
En los últimos tiempos hemos sido bombardeados sobre la candidatura de Madrid para los Juegos Olímpicos. Supuestamente, el Masters Series de Madrid es su símbolo, sin embargo, el torneo está muy lejos de ser un ejemplo de organización. Enumero, a modo de ilustración, los innumerables descalabros que padecí como espectador. Para empezar, los puntos de venta de entradas tienen horarios muy restringidos (los cajeros sólo funcionan hasta las dos de la tarde).
A eso, un detalle comparado con lo demás, hay que agregar que los asistentes debemos sufrir instalaciones a medio terminar e inexplicablemente sucias; servicios muy mal mantenidos; puntos de información deficientes dentro del propio recinto; un teléfono de información que nadie contesta; boleterías donde atienden jóvenes que no tienen la menor idea de lo que están haciendo; marcadores que inexplicablemente comienzan a funcionar cuando los partidos están finalizando...
En fin, la página web es deficiente pues no está actualizada, por lo que, si se quiere conseguir la programación del día siguiente, no queda más alternativa que acceder a la página de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP). También se echan de menos instalaciones cómodas y, por cierto, accesibles para personas con discapacidad en las pistas auxiliares. En suma, el Masters Series de Madrid, que se jacta de ser un torneo a nivel mundial, está plagado de deficiencias. Los organizadores deberían reflexionar, ser menos eufóricos y más autocríticos. El secreto de un auténtico gran torneo son los detalles y no una gran pista central, que además está inconclusa.
Pero lo más bochornoso de todo, deportivamente hablando, es que la programación tenga que atrasarse debido a que pistas techadas se inunden con el primer chaparrón. Creo que la imagen de personas intentando desesperadamente secar con toallas las canchas empapadas no es la mejor publicidad para la candidatura. Y no lo digo yo, la organización debería bajar de su pedestal y darse una vuelta por las pistas para escuchar los comentarios de espectadores y jugadores.
