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Interior prevé retirar 6.000 carnés al año con el sistema de puntos

El 22,1% de las carreteras tiene un índice de riesgo alto, según el RACE

La entrada en vigor del carné por puntos, prevista para antes del verano, provocará que unas 6.000 personas pierdan anualmente el crédito de 12 puntos -ocho para los noveles- que se concederá a cada conductor, con la consiguiente retirada del permiso y la obligatoriedad de asistir a cursos de reeducación si se quiere volver a coger el volante. Es la previsión del Ministerio del Interior, según anunció ayer su titular, José Antonio Alonso.

Pero la cifra es aún más llamativa si se tiene en cuenta el número de conductores que podría acudir a cursos de reciclaje para recuperar parte de los puntos perdidos: 60.000. Alonso adelantó además, durante su intervención en el Congreso, en la Comisión no permanente de Seguridad Vial, que la Dirección General de Tráfico (DGT) ha cifrado en 400 los centros que será necesario acreditar para dar respuesta a esta nueva demanda. Queda por determinar quién se ocupará de esta tarea.

Desde que el Gobierno anunció la puesta en marcha del sistema de puntos -que ha conseguido reducir la siniestralidad en algunos países de Europa, como Francia, hasta un 20%- tanto las autoescuelas como los clubes de automovilistas comenzaron a postularse para hacerse con un negocio suculento. Si bien no se ha rubricado ningún acuerdo, José Miguel Baez, presidente de la Confederación Nacional de Autoescuelas, cree que la balanza se inclinará de su lado. "Tenemos 8.050 centros en toda España, supondría tener un único interlocutor, en la mayoría de los países de nuestro entorno estos cursos los dan las autoescuelas... Está claro que si alguien está bien situado somos nosotros", indica. En cualquier caso, el ministro del Interior está dispuesto a que los cursos de reeducación "ni sean un fraude ni un puro trámite" e indica que el objetivo es la "modificación del comportamiento de los infractores".

Durante la exposición del anteproyecto de ley, que fue aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros, Alonso justificó que los conductores con menos experiencia tengan menos puntos iniciales, dado que "entre el 33% y el 35% de los accidentes tienen como responsable o víctimas a jóvenes".

Desde el principal partido de la oposición se criticó la falta de diálogo previo a la aprobación del anteproyecto. El diputado del PP Federico Souvirón propuso que quienes "pierdan el carné en reiteradas ocasiones no se les permita volver a conducir y que los cursos se impartan en función del tipo de infracción cometida".

También reclamó mayor concreción sobre los cursos de reciclaje, el registro de infractores y cómo se realizará la coordinación entre las distintas policías. CiU solicitó, por su parte, un "diálogo parlamentario sosegado para incorporar propuestas y lograr un modelo mejor". Un modelo que afectará a los 22 millones de españoles que tienen permiso de conducción.

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Conducción de motocicletas

Entre las medidas previstas por el Gobierno también estaba aprobar la autorización para conducir motocicletas de hasta 125 centímetros cúbicos para aquellas personas con carné para conducir turismos. La medida entra en vigor hoy y no precisa de ningún trámite, sólo tres años de antigüedad del permiso de la clase B.

En la última década la carretera se ha cobrado la vida de 61.196 personas, el equivalente a la población de Toledo. La cruzada de la DGT para reducir la siniestralidad en carretera, que provocó el año pasado 4.030 muertes y dejó más de 2.061 heridos graves tiene muchos frentes. Uno de ellos, que corresponde al Ministerio de Fomento, es la señalización y el estado de las vías. Según el informe europeo EuroRAP, en el que participa el Real Automóvil Club de España (RACE), el 22,1% de las carreteras que dependen del Estado presenta un índice de riesgo elevado.

El informe ha analizado un total de 59.536 accidentes con víctimas entre 2001 y 2003, y 780 tramos en los que se dividió la red de carreteras del Estado. Las comunidades autónomas que tienen mayor porcentaje de tramos con índice de riesgo -"número de accidentes mortales y graves ocurridos entre 2001 y 2003 por cada 1.000 millones de vehículos kilómetro"- alto son Aragón, Comunidad Valenciana y Asturias, con 10%, 9,7% y 8,7% respectivamente. Cataluña, Extremadura, Madrid y Murcia cuentan con un porcentaje nulo de tramos con este índice de riesgo.

El estudio no contabiliza los datos del País Vasco y Navarra por la escasa representatividad, inferior al 1%, que tienen los tramos de la red del Estado en estas comunidades. Según el RACE, el índice de riesgo alto ha descendido un 59,42% con respecto a la anterior entrega de este estudio, en 2001. El riesgo medio alto se redujo el 22, 04; aunque ha aumentado el índice de riesgo medio-bajo y bajo, el 31,40% y el 84,62%, respectivamente. España sigue por encima de la media de la UE en número de muertes.

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