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TECNOGENTE

CurT y Tevac ciberjugadores

Estos dos jóvenes se dedican a ir de fiesta en fiesta informática, para divertirse por poco dinero y para ir mejorando sus ordenadores

Enrique Palacín, más conocido como CurT, y su amigo Tevac, Diego Casasnovas, acuden cada año a más de una veintena de fiestas informáticas. Lo hacen desde 1999. El mayor problema es compatibilizar las parties con el trabajo.

CurT (a quien le gusta que se escriba con mayúsculas la primera y la última letra de su seudónimo) es instalador autónomo de líneas ADSL y ha cumplido 26 años. Tevac tiene un año menos y es técnico de informática. Estos dos altoaragoneses intentan ir todos los años a dos o tres parties grandes, como la Euskal o la Campus, y a otras veinte más pequeñas. "A veces se trata de un fin de semana donde nos juntamos con amigos. Una party no se compone sólo de ordenadores, también puede tener su parte gastronómica. Después de comer o cenar, hacemos una sesión con los ordenadores", explica CurT.

A diferencia de su amigo, asegura que acude a las parties y a concursos para ganar algún premio que le permita mejorar su ordenador. "Si te sacas para pagar la party y cambiar la tarjeta de vídeo, ya es suficiente".

Tevac explica que coge las vacaciones en función del calendario de fiestas informáticas. Antes cargaba con un ordenador de sobremesa de fiesta en fiesta. "Me compré el portátil porque es mucho más cómodo. Ya no llevo otro equipo. Es más que suficiente para lo que hago".

Como todos los jugadores, Tevac tiene sus preferencias. Por ejemplo, no le gusta que el cable del ratón sea muy largo. "Lo he acortado porque así se maneja mejor". Protege el portátil con un candado que se bloquea con una combinación de cuatro números. Como soporte, usa dos ventiladores externos. "Así lo cuido un poco y se alarga la vida del portátil". Junto al ordenador, la agenda electrónica Palm. "Es casi una manía porque lo anoto todo. Además, me resulta muy útil cuando viajo, por que llevo los mapas de muchas ciudades".

CurT reconoce que está "viciado" con los torneos. "Hasta este año empleaba un ordenador con procesador AMD 500. Iba a las parties y era el que utilizaba un ordenador más antiguo. Compensaba la falta de prestaciones de la máquina con horas de juego para entrenarme", dice sonriendo.

Ahora, el nuevo ordenador dispone de un microprocesador Pentium IV a 3 Ghz y una pantalla de 17 pulgadas. "No me puedo quejar del cambio".

Manías con el ratón

Los ratones siempre deben ser Logitech. "Me he acostumbrado al modelo Pilot, que es el que se emplea en el mundo del Quake. Está muy bien diseñado y se adapta perfectamente a la mano. Aunque el que utiliza es óptico, en la bolsa siempre lleva uno de bola. "Los ópticos funcionan muy bien. A no ser que se meta pelusilla por dentro, no fallan". Para jugar a FIFA emplea siempre el mismo Game Pad. "Tengo mucha estima por la alfombrilla. Nos la dieron en la Campus Party en 2001. Y me trae buenos recuerdos. El ratón se desliza mejor que en otras".

A juicio de CurT, lo más importante a la hora de organizar una party grande es "que en las proximidades se pueda encontrar un centro comercial para comprar lo que necesites". Después de tantas fiestas, prefiere descansar alguna noche en hotel. "Si te lo puedes permitir, claro. La tienda de campaña sirve en la primera party".

CurT y Tevac coinciden en que el mejor momento de una fiesta informática es de madrugada, cuando empieza a amanecer. "Es cuando menos gente hay. Cuando comienza a entrar el sol y la gente se pone nerviosa porque ve que se está acabando. De repente, alguien grita, rompe el silencio de la noche y los demás le aplauden", se recrea CurT.

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